viernes, 24 de diciembre de 2010

Discurso de Navidad del Capitán Pakhicius

Buenas noches. Quiero que mis primeras palabras en Nochebuena sean de felicitación para el gran Universo Defensor pero también para todos aquellos rivales y sin embargo compañeros que comparten con nosotros la construcción de esta gran empresa común que es la social. Una empresa en la que los Defensores son pieza capital pero en la que todos los equipos aportan su granito de arena al engrandecimiento de este intento de deporte que hacemos cada semana. Felicidades a todos.

Echando la vista atrás, veo que ha sido éste un año de sufrimientos pero también de alegrías. De penurias pero también de reconocimientos. De tristes adioses como los de Chavi y felices momentos como la boda de Peplowski y Edurne, cuya consumación marital ha de procurar una larga progenie a la estirpe Defensora que ya nada en la abundancia con varios miembros en su linaje. También de evoluciones, ya que comenzamos el año jugando en el infame pabellón de Santa Ana, antro abyecto donde compartir el jabón era tarea difícil y lo acabamos jugando en Tenerías, santo y seña del espírtu Defensor y donde los hombres se miran cara a cara cuando se duchan sin importar lo que en ese momento tienen en la mano. Hubo momentos de histórica satisfacción, cuando el contubernio antidefensor sacado a la luz gracias a Wikileaks nos ha dado una vez más la razón en nuestras demandas de justicia social. Pero es así, amenazados a diestro y siniestro, por delante y sobre todo por detrás, como los Indómitos Defensores encuentran como nadie su fortaleza. Una fuerza basada en la cohesión humana de sus miembros que avanzan firmes y enhiestos hacia un prometedor futuro de reconocimiento y parabienes.

Quiero recordar a los Defensores que ya no están entre nosotros, a los honorarios como Peter Graves, Antonio Ozores o Leslie Nielsen y a los que vistieron físicamente la camiseta como Drogakevicius y Chavi. Ellos lo dieron todo por este equipo y a cambio recibieron de él la sempiterna impronta de gallardía que como sello indeleble se asocia a sus integrantes.

Es llegado el momento de dejar de lado nuestra lucha y volver por unos días a la bien merecida paz del hogar. Nuestra mayor virtud es la de haber sido fieles a unas ideas, porque si por algo seremos juzgados en el futuro no será por nuestros resultados, afortunadamente, sino por la disposición a entregarse más allá del deber por la grisigualda. Dentro de unos días nos veremos un año más en la arena de la Social y será para mí motivo de orgullo y satisfacción capitanear un año más, si la salud me respeta y vosotros queréis, este equipo de valientes que arrostran las dificultades sin dar un paso atrás, que se ríen del mundo más fuerte que él de ellos, que olvidaron la vergüenza en el pupitre de bachillerato y que hacen posible la más inaudita de las causas: su propia existencia.

Paco, Oscar, Ricardo, Álvaro, Jorge, Pepe, Miguel Ángel, Jose, Iñaki, Camilo, José Ignacio, Chavi, Drogas, Afición... ¡DEFENSORES!

¡FELIZ NAVIDAD!

lunes, 20 de diciembre de 2010

Defensores hasta el final: Classic 64 - Defensores 65

Comparezco hoy ante vosotros no para hablar de estadísticas y resultados, sino para hablar de sentimientos. Quien quiera un relato exacto y pormenorizado de las canastas y el devenir del partido que consulte el acta. El que acuda a ella verá un registro minucioso y notarial de lo que ocurrió en la cancha pero se le hurtará algo más grande que nadie vio, nadie que no fuera un Defensor, claro. Porque dentro de esos uniformes grisigualdas latía algo grande y caliente, que cuando crece lo hace sin límite consiguiendo unirnos a todos en un éxtasis Defensor. Para el que todavía esté dudando de miembro aclararé que me estoy refiriendo al defensocorazón, órgano hiperdesarrollado que nos permitió sobreponernos a nosotros mismos y alcanzar una victoria difícil y trabajada. Sí, cometimos muchas cagadas pero, ¿qué serían los Defensores sin sus patanerías? ¿qué mérito tendría ganar sabiendo jugar? El domingo asistimos a la sublimación de la ascética defensora, conseguimos la victoria pero sin olvidar en ocasiones nuestra cara gañán y torpe y por eso, muchachos, esa victoria tiene un valor soberbio. Enhorabuena a todos.

Todo comenzó muy pronto, demasiado. Tras colapsar el colector general de la ciudad los Defensores se dirigían poco a poco a su cita. Mientras tanto, en la celda de la madre conserja (M.C. en adelante) sonaban los maitines de fondo mientras se calzaba las pantuflas con el escudo del Vaticano y se santiguaba doblemente. La grey defensora hizo acto de presencia en la puerta Pompiliana a las nueve y diez de la mañana, Jose, Furillo, Peplowski y Pakhicius, éste último en pantalón corto se unían a Camilo ante la cerrada puerta. Mientras tanto en su celda, M.C. ajusta su refajo de arpillera atándolo a su vientre con una soga, se libera con estruendo de las flatulencias acumuladas durante la noche y se rasca el pelo deformado por la almohada. Todo discurría en la más absoluta paz sólo turbada por los golpes que se oían en la calle. Allí, el capitán Pakhicius se ve obligado a utilizar métodos artesanales para llamar la atención de los de dentro ante el principio de congelación que sufre en las piernas y aún más allá. Poco después M.C. recoge la dentadura postiza del vaso de su mesilla y con parsimonia la introduce en sus fauces, la ajusta y da un par de dentelladas al aire para comprobar que encaja. Fuera, los Defensores, el equipo arbitral y algunos rivales, golpean el suelo con sus ateridos pies para entrar en calor. Una llamada parece confirmar que el pabellón se abrirá, pero como el cielo, necesita del advenimiento de quien tiene las llaves. Al mismo tiempo M.C. retira la leche del fogón y hunde en ella las magdalenas que se impregnan lentamente del fluido vacuno. Con la cuchara recoge los empapados trozos y los acerca con sosiego a la boca, cuya recién incrustada dentadura se demuestra más que suficiente para deshacer los esponjosos pedazos. Poco a poco discurren por el añoso esófago y calientan lentamente el anciano vientre de M.C., una espesa gota de leche resbala por la comisura de los labios (de la boca, digo) y cae sobre la hoja parroquial que lee con detenimiento. En la calle, cunde el desánimo. Nadie sabe a lo que atenerse, los nervios están a flor de piel, la incertidumbre y el desánimo cunde entre los deportistas que piensan ya en irse a sus casas tras más de media hora de angustiosa espera. Pero en ese preciso momento, M.C., vestida con la chaqueta de ganchillo que Sor Inés le dió antes de alcanzar la gloria, sale al frío de la mañana para abrir el pabellón. ¡Madre de dios, con las prisas se me ha olvidado ponerle la velita a San Genaro!, se le oye murmurar.

Una vez dentro los Defensores nos olvidamos de los malos momentos y comenzamos a calentar. El partido comienza con media hora de retraso, según refleja fidedignamente el acta "por motivos ajenos al equipo arbitral", una egoísta exoneración que debió incluir también a los equipos contrincantes y aún a sor M.C. y apuntar más alto, como seguramente el tiempo acabe por descubrir. El primer tiempo muestra claroscuros Defensores, con los dos equipos todavía en precalentamiento. No obstante, dos triples de los Classicos les hacen pornerse cinco arriba con un marcador de 15 a 10. En la reanudación vendaval Defensor, hasta cinco triples que culminan una racha de buen juego y que consiguen dar la vuelta al marcador 30 a 33 favorable a los grisigualdas. Tras el descanso, el tercer cuarto supuso un intercambio de puntos que mantuvo la igualdad en el marcador dejándolo 48 a 47 a su término. Y así llegamos al definitivo cuarto con las espadas en todo lo alto. Salimos más entonados que ellos y ya en el minuto dos tomamos la delantera en el marcador, si bien por un mísero punto. A pesar de su acierto desde la línea de triples conseguimos marcharnos de hasta seis puntos en el minuto ocho pero una serie de incontinencias por nuestra parte apretaron un marcador que aparentaba decantar el partido de nuestro lado. En último minuto el equipo cedió el protagonismo al bueno de Jose que se encargó de hacerlo todo, recibió las faltas apresuradas del rival, lanzó los correspondientes tiros fallando los que consideró oportunos, pero cuando todo parecía perdido acudió a capturar el rebote de oro y anotar la canasta que a la postre nos daría la victoria por el definitivo 67 a 68.

Enhorabuena a los rivales y a nosotros por la victoria que nos permite tomarnos los turrones un año más, con la compañía de la esquiva victoria. Defensores, podéis holgaros en vuestras casas con la satisfacción del deber cumplido antes volver a la lucha, pero eso será el año que viene, el cuarto año triunfal.

Hasta entonces...¡DEFENSORES!

viernes, 17 de diciembre de 2010

Jornada VII

Que nadie piense que va a dormir el domingo. A las 9:30 y cuando digo nueve no quiero decir veintiuna sino nueve, y contra Classic, todo Defensor con alta médica deberá presentarse en el pabellón de Pompiliano para someterse a una nueva prueba. Prolonguemos en la cancha el plácido sueño del domingo y hagamos que este partido también lo sea, llevaos las legañas y el pijama de los Lakers para el que será el último partido del año para los Defensores.
Por que la vida es sueño,
y en soñando que ganamos ganaremos,
o por lo menos cumpliremos
con la pérfida tradición
que dice que para alcanzar la gloria
necesitas la victoria
o en su defecto, un revolcón.
¡DEFENSORES!

lunes, 13 de diciembre de 2010

Explorando límites: Defensores 48 - Boscos 67

Mucho se ha hablado de la derrota Defensora del fin de semana, queriendo enmascarar con ello seguramente, la penosa racha de resultados de nuestro archirival el CAI y cargando sobre nuestros hombros la pesada carga de la representatividad de nuestra comunidad. Nosotros no vamos a bajar los brazos, por que si de algo no puede calificarse lo vivido el domingo es de derrota. Los Defensores, en un ejercicio de autoexploración que no sólo ejercen en las duchas, quieren saber hasta dónde son capaces de llegar, qué infralímites tienen en cuanto a su juego se refiere. Y en esa faceta, como en todas las demás, salen triunfadores. En efecto, cuando los laureles se posen sobre sus cabezas los Defensores no necesitarán que un esclavo les recuerde que sólo son hombres. Ya lo saben. Nuestro triunfo fundamenta su fuerza en las derrotas que, apiladas unas sobre otras, nos auparán a la gloria. Y es que queremos la victoria pero tranquilamente, ansiamos el triunfo con moderación, perseguimos la excelencia con mesura y queremos la fama con comedimiento.
El partido comenzó con los Defensores aplicadísimos en ineficiencia, los Bosquenses, sin hacer muchos esfuerzos conseguían una renta de 6 a 15 que les permitiría manejar el resto del partido con comodidad. El segundo cuarto siguió la misma tónica con los Defensores fabricando más empanadas que en Sanxenxo y llegando al minuto tres con máximas diferencias de trece puntos que se reducirían al descanso con un 14 a 25. En la reanudación y visto que por ese camino no íbamos a ningún sitio llevamos el partido a nuestro terreno, el de la locura y la imprecisión por el que tampoco conseguiríamos nada. Eso sí, nos deparó bellos momentos de baloncesto como el triple "sin" de Miguel Angel, la única cosa "sin" que pasó por sus manos el fin de semana. Un momento para el recuerdo con las carnes tolendas de nuestro compañero elevándose presa del misticismo, la mirada perdida como en éxtasis y una mecánica de tiro impecable. Con un lanzamiento así ¿qué importa dónde acabó el balón?. Las cosas se igualaron en una lucha de poder a poder donde los Bosconianos no supieron aplicar más que un juego plano de anotación frente al apabullante estilismo Defensor. Uno tras otro nuestros jugadores ofrecían a la grada sus apolíneos cuerpos contorsionados en facturas imposibles. De haber estado en ellas Scariolo se hubiera ido a su casa, pero si hubieran presenciado el partido Vitorio y Luchino nos hubieran ofrecido desfilar en Cibeles. Los Bosquímanos deguían sin conseguir otra cosa que simples canastas que oponer a nuestros fantasiosos lanzamientos. La reanudación poco cambió las cosas, un intercambio de puntos que hizo acabar el tercer cuarto con un 33 a 46 poco esperanzador y un último cuarto en el que llegamos a ponernos once puntos abajo en el minuto seis pero que acabó con los consabidos 48 a 67. En definitiva, la diferencia conseguida en el primer cuarto fue una losa demasiado pesada que levantar, más aún si además de hacerlo teníamos que mantener ese nivel de estilismo.
Seguimos donde estábamos, a tan sólo seis victorias del primero pero con un partido menos, esperando el momento de asestar el golpe de gracia, nunca mejor dicho, a esta liga que acabará siendo nuestra, cuando los ensoberbecidos líderes de hoy dejen paso a los auténticos representantes de la elegancia, la honorabilidad y por qué no decirlo, de la belleza extrema.
¡LOS DEFENSORES!

viernes, 10 de diciembre de 2010

Jornada V

Después del buen sabor de boca del último partido en el que pusimos en aprietos al primer clasificado de la liga, los Defensores se aprestan una vez más con heroica entrega a tomarse algo por el Casco Viejo en la mañana del domingo. Antes, eso sí, y para justificar algo las tapas consumidas, pasarán por el Pabellón de Tenerías donde darán el acostumbrado recital de juego al que tienen acostumbrada a su pertinaz afición a la intempestiva hora de las once de la mañana. Como siempre pasa con un equipo de nuestra categoría, se enfrentarán a un rival situado eventualmente por encima en la anodina e injusta clasificación por puntos que se empeña en mantener la Federación. No nos importa, los Defensores se crearon para deleite gozoso de sus fans, como estandarte inequívoco de unos valores, como memorial redivivo y paradigmático de una honrosa prosapia, como clave hermeneútica de un modo de vida diferente, el Defender Way of Life.
¡A por ellos Defensores!

lunes, 6 de diciembre de 2010

Filtraciones Wikileaks que afectan a los Defensores

Muchachos, como no podía ser de otra forma de entre los cientos de documentos que se han publicado en Wikileaks existen varios que nos conciernen. Os adjunto una serie de transcripciones que he recibido en mi despacho y que merecen ser puestas a disposición de la opinión pública. Sobran los comentarios:

Archivo 001. Secretaría Estado - Federación Aragonesa Baloncesto. Fecha: Octubre 2010. Código clave: Fin Defensores.

Jaime Litsaveski: ¿Tienes preparados a los Caballeros?

Presidente de la FAB: Están todos, pero quería comentarle... que... vamos que esto no es Madrid, que aquí deberíamos... vamos creo yo... que cambiarles el nombre. Que ese suena muy pomposo y se nos van a reír.

J.L.: ¿A qué te refieres?

P.F.: Pues que mejor llamarles... no sé... Craballers, por ejemplo.

J.L.: Eso tú mismo, el caso es que acaben con esos malditos Defensores.

P.F.: No va a ser fácil.

J.L.:¿Qué coño dices?

P.F.: Eh... perdona Jaime... pero esos tíos son de otra pasta, ya lo hemos intentado muchas veces y... y no hay manera.

J.L.:¡No me jodas!, otra vez con esa monserga. Vamos a ver, tú no has reclutado personalmente a esos... esos Caballeros?

P.F.: ...Craballers

J.L.:¡Bueno, Craballers, que me la suda cómo les llames, joder, que lo voy a tener que hacer todo yo!

P.F.:Sí, sí, son de confianza... están elegidos entre los mejores. Los hemos preparado bien... en un campamento extremo en Belchite... son muy duros. Hay algunos ex del Cai... vamos que esto es seguro. Los Defensores son historia.

J.L.:Pues a ver si es verdad...

P.F.:..perdona Jaime... que me... que me pasan una llamada por la uno... (pausa de dos minutos)...ehm... ¿Jaime?...err... ¿Señor Litsavetsky?

J.L.: Dime, hombre, dime.

P.F.: Perdone, pero... me dicen que no va a ser posible.

J.L.: ¿El qué?... ¿qué no va a ser posible?

P.F.: Los Craballers... que me dicen que no van...

J.L.: ¿Que no van... que no van, a dónde no van?

P.F.: ...que se han rilado, que ahora dicen que no se atreven, que se desapuntan... que tienen miedo... lo siento, yo...

J.L.: Joder, hombre, pero... ¿es que lo tengo que hacer todo yo?...

Archivo 002. Sergio Scariolo - Federación Española de Baloncesto. Fecha: Calsificada. Código clave: Fin Defensores

Signore Presidenti de la Federazione, dada la corriente situazione dil mio equippo, me voi en la obligazione de facere la suiguiente solicitude: Por il vene de la Selezione Nazionale Spagnola sarebbe opportuno includire nessuno Cavaliere Difensore in la squadra. Le sue capacitá sono fantastici, molto meliori qui miei giocatori. Sono bello, intelligente e facen el suo bagno con pastiglia de sapone. Per favore, mi porti un Difensore.

Il suo affetuosso, Giorgio.

Archivo 003. Madre Superiora Escolapia - Secretaría Estado para el Deporte. Fecha: Indefinida. Código clave: Fin Defensores

Madre Superiora Escolapia: ¿Señorita? Póngame por favor con el Señor Litsavesky. De parte de Sor Angustias.

Secretaría Estado Deporte: ¿Madre? ¡Qué alegría oírla, dígame, dígame!

M.S.E.: ¡Jaimito, déjate de zalamerías, que ya sabes por qué te llamo!

S.E.D.: Ehm... sí, sí, supongo que es por el caso Santa Ana, pero madre, déjele que le explique...

M.S.E.: ¡Que no me tienes que explicar nada, Jaimito, que eres peor que cuando te tenía en clase! Vamos a ver, que estamos en boca de todos los de la Social, que hasta hemos salido en el blog de los Defensores. Que lo que tienes que hacer es mandarlos a otro pabellón, que me buscas la ruina, ¿no ves que estos no lo dejan?

S.E.D.: Por favor, madre, no me llame así, que ahora tengo un cargo. Pero vamos a ver... ¿hizo usted lo que le dije?, ¿Les quitó los bancos de las duchas?

M.S.E.: Sí Jaimito, sí que se los quité, pero fue peor el remedio que la enfermedad. Las novicias los hicieron astillas y se las guardan de incestuoso recuerdo en sus celdas, Dios sabe lo que harán con ellas. Pero a ellos les da igual, se siguen duchando. ¿Son los únicos, eh? pero se duchan.

S.E.D.: ... Ya, ¿y el bromuro?

M.S.E.: Nada, no surte efecto. Y eso que es bromuro de primera, nos lo mandaron por valija desde el Vaticano, que yo no sé cómo no se dan cuenta, que sale el agua de las duchas que parece tierra, pero ni por esas. ¡Ay, Jaimito! que estos Defensores son muy hombres, que no se les apacigua así como así. Tú no has visto sus viriles torsos ni sus bien contorneados vientres... ¡Jaimito que me pierdes! ... sus testas alopécicas brillar por el sudor, sus hormonas apestando los pasillos... ¡que no sé por qué te hice caso!... sus holgadas prendas grisigualdas bien ahítas de carne... ¡que no respondo!, ngh... ¡confesión!

S.E.D.:... ¿Madre?...

Archivo 004: Presidencia CAI - Sucursal 25. Fecha: 2009. Código clave: Fin Defensores

Sucursal: ¿Manolita?, páseme con el Súperintendente, por favor, soy Peláez, de la veinticinco.

Presidencia CAI: ¿Peláez, qué tal va usted? ¿Y qué tal la familia?

S.: Muy bien, muy bien, señor Súperintendente.

P.C.: Dígame, ¿qué se le ofrece?

S.: Pues perdone que le moleste, pero es que... (en voz muy baja) ... es que tengo aquí a uno de estos de la foto, ya sabe, esas fotos que nos hicieron llegar en la circular de septiembre...

P.C.: ¿Cómo, que tiene delante a uno de esos Defensores?

S.: Sí señor, y quiere hacer un ingreso en la cuenta Defensora.

P.C.: ¡Ni se le ocurra, Peláez!, ¿me oye? ¡Ni se le ocurra!

S.: Pero señor, con todos los respetos, que la Ley Bancaria estipula que...

P.C.: ¡Qué Ley Bancaria ni qué ocho cuartos, Peláez!, ande cóbreles comisión por lo menos.

S.: Pero... pero es que eso es ilegal... además... no sé, en persona parecen buena gente...

P.C.: Peláez, por su padre, no me los defienda... no me los defienda que le mando de cajero a la Sucursal de Sebastopol. ¿No ve que esos anormales le están amargando la vida al CAI? Que les ponen en evidencia, hombre. Encima juegan sin publicidad y nos están jodiendo el diferencial.

S.: ... Sí señor Súperintendente... pero... he oído que algunas agencias se niegan a cobrarles comisión... dicen... dicen que sus ideales son nobles, que reparten sus puntos entre los más desfavorecidos... y luego está lo de su atractivo físico...

P.C.: Sé a lo que se refiere... leyendas urbanas. Son mala gente, dicen que estuvieron detrás de lo de Imanol Arias y Pastora Vega. Pero no quiero que piense que nuestra empresa censura a sus empleados ¿Recuerda usted a Menéndez?

S.: Oí que le pillaron con una copia impresa del blog de esos canallas...

P.C.: Está de interventor en la oficina de Kaliningrado. ¿Me entiende?

S.: Ehm... sí señor, sí señor Súperintendente, a sus pies, se hará como dice.

P.C.: ¡Ah, y Peláez... súbales la hipoteca!


Gracias a Wikileaks conocemos los entresijos del complot para desacreditar y acabar con los Gloriosos Defensores. Pero como Capitán de esta torpedeada escuadra os digo que si los Defensores no alcanzan el éxito... ¡será por sus propios méritos!. Seguiremos informando.

lunes, 29 de noviembre de 2010

R.I.P. Leslie "Defensor" Nielsen

Queridos compañeros, el universo Defensor está de luto. En un día como hoy las tradicionales preocupaciones dejan paso a otros sentimientos más profundos. Y es que, amigos, ayer fallecía uno de los más grandes. Un personaje que de haber jugado a baloncesto hubiera militado sin ninguna duda en nuestro equipo, pues si dijésemos que se trataba de alguien que desde el más absoluto fracaso en su profesión alcanzó las cotas más altas del éxito a través de la descojonación más absurda podríamos estar hablando de cualquier Defensor. Por ello, anuncio la incorporación del Señor Nielsen a la selecta nómina de Defensores Honorarios.
Descanse como pueda.
¡DEFENSORES!

jueves, 25 de noviembre de 2010

Jornada VI

El sábado los Defensores tienen una nueva cita con su destino. A las diecinueve y quince de la tarde y en el añorado campo de Pompiliano. Será un encuentro esperado por los seguidores de la Social en el que los Amigos de Raul intentarán arrebatar, seguramente sin éxito, el título de equipo más elegante, estiloso y atractivo, a los actuales detentadores del primer puesto en todas esas categorías: los Fabulosos Defensores.

martes, 23 de noviembre de 2010

Polvo eres: Defensores 31 - Pitera 51

Estamos en la última jugada con anotación del partido a un minuto del final: los Defensores capturan un rebote tras fallo del rival, el balón acaba en las manos de Pakhicius, accidental base del equipo, si bien con capacidades contrastadas. Bota rápidamente, levanta la cabeza y ve a Furillo levemente desmarcado en la otra mitad del campo, parece imposible hacerle llegar el balón pero aún así lo intenta. La pelota llega con precisión milimétrica a las manos del Defensor que en una décima de segundo debe decidir qué hacer con ella. La situación no es favorable, el Defensor más cercano es Pakhicius, quien en la línea de triple de su propio campo acaba de pasarle el balón y nadie en su sano juicio podría pensar que un pase al Capitán tuviera éxito, pero aún así el hermanísimo lo intenta. Son muchos años de romper muebles en casa jugando en canastas de malla de naranjas, de dejarse los dedos en artesanales juegos de básket para preguntarnos ahora porqué ese balón va a alcanzar su destino. La bola, con un efecto endiablado, atraviesa la muralla de dos jugadores rivales que ven impotentes cómo su defensa es traspasada con habilidad. Hay un último defensor rival que intenta cortar el pase pero el efecto hace que el balón quede muerto en la parte alta de la botella, un chasquido delata su cintura rota. No es normal que algún Defensor alcance ese balón pero ya hemos demostrado muchas veces que somos unos anormales. Pakhicius, quien hasta hace unos microsegundos se hallaba en su campo, aparece como por ensalmo en el lugar preciso y ante el cadáver de su contrincante se lleva el balón como si se hubiera untado las manos en pegamento o algo peor. El cincuenta por ciento de la heroicidad estaba conseguida pero aún quedaba el otro cincuenta. El Capitán atrae la bola a su ser mientras da dos prodigiosos pasos y se alza majestuosamente en el aire como Nureyev en El Baile de los Cisnes. El último rival hace un esfuerzo y aún con parte de su cuerpo inválido se lanza a taponar la entrada como un zombi. Pakhicius, ya en el aire, ve llegar el ente piteril y sus aviesas intenciones. En unos segundos que parecen eternos, recoge su mano ya extendida para ejecutar con bella factura la entrada, deja pasar a su adversario y vuelve a desplegar con prodigiosas dotes su brazo que, con inusitada precisión, coloca el esférico contra la tabla y éste, con un rebote, entra mansamente en la canasta. Tras el salto, una nube de polvo se levanta del parqué y el capitán Defensor queda inmóvil con sus perfilados músculos todavía tensos por el esfuerzo y los restos de su melena ondeando al viento, mientras resuenan a lo lejos los ecos del Sitio de Zaragoza. El banquillo es un clamor, las gradas con nuestra aficción(ada) prorrumpen en un alborozado grito de júbilo incontenible, los visitantes enmudecen ante tan orgiástica muestra de gozo. ¿Han ganado los Defensores el encuentro?, ¿se ha consumado la sorpresa?, ¿son los protagonistas de la mejor jugada de la jornada?, ¿estamos acaso ante el mejor equipo de la Social?...
... cuarenta minutos antes...
El partido comienza con una empanada Defensora. Cuando las cosas se hacían bien no se conseguía canasta pero cuando intentábamos hacerlo mal, lo bordábamos. La situación arrojó un marcador de 0 a 8 en el minuto siete. Al final del cuarto, 4 a 12. En el segundo las cosas no mejoraron al principio, de hecho otra vez el minuto siete señalaba la máxima diferencia, 6 a 21. A partir de ahí, el partido funcionó con la especialidad de los Defensores “los arreones”. El primero se produjo con el concurso de Furillo, uno de los destacados, que nos hizo ponernos 13 a 23 cuando quedaba un minuto para el descanso. Lamentablemente a todo arreón le seguía un contraarreón del mismo orden pero de signo contrario. Un parcial de cero a siete dejaba las cosas como estaban 13 a 30. A la vuelta del descanso acaeció el segundo arreón Defensor, esta vez por mediación de Miguel Angel, que con dos triples nos acercaba 23 a 34. Pero una nueva contrarreacción del rival hacía que en el electrónico figurase un 25 a 44. Así las cosas el último cuarto no fue más que un intercambio de golpes que acabó con el marcador ya sabido y con la jugada reseñada al principio de la entrada. Los Goriosos Defensores caían ante un rival superior, que tiene un gran potencial bajo los aros (hasta cuatro jugadas de falta con canasta y tiro adicional consiguieron) y al que hay que dar la enhorabuena porque de seguir así corren el riesgo de acabar en la primera posición. Los tiros libres, aún cuando en este partido no fueron decisivos, siguen persiguiéndonos, esta vez cuatro anotados de catorce lanzados, lo que supone un acierto de 28’571428 periodo.
Es hora de responder a las preguntas que se formulaban antes. Y efectivamente la respuesta a esas preguntas es afirmativa. Los Defensores, que superan a sus rivales en todos los órdenes, caen por la sutileza de unas cuantas canastas. Sabemos que es injusto pero así es este deporte, cuando nos dijeron que existía y que no hacía falta pasar un examen para jugar a él, asumimos las consecuencias. Pero que nadie se equivoque, los Defensores muestran las cicatrices de sus derrotas, dentelladas rivales que no corroboran sino que este equipo todavía permanece en pie. Porque, ¿qué mérito tiene ganar siendo el mejor?. No amigos, los Defensores quieren alcanzar el éxito a través de la torpeza, vestir las túnicas de los vencedores sobre los harapos de la incompetencia, colocarse los laureles de los campeones con la impericia de los ineptos, subirse al olimpo a través de las escaleras de la ignorancia más atroz. Sólo así nuestra misión tendrá éxito y creedme compañeros si os digo que lo estamos consiguiendo.
Infernum Defensorum in gloria transformavit, así pues:
¡DEFENSORES!

martes, 16 de noviembre de 2010

A la tercera fue la vencida: A Kuxara 27 - Defensores 29

Después de un fin de semana en el que el deporte patrio se ha abonado a los desastres, ni el CAI, ni el Zaragoza, ni siquiera Alonso, han podido dar una alegría deportiva. Han tenido que ser los extraordinarios Defensores los que con su entrega y pundonor habituales firmaran una victoria que devolviera la sonrisa a los aficionados. Efectivamente, el muro del honor vuelve a ser grabado con el escoplo de las grandes ocasiones y acumula en su base las esquirlas producto de las victorias Defensoras. El áureo cincel con el que la historia estampa sobre el envidiado monolito los nombres de aquellos que cayeron con honor, ha vuelto a ser sacado de su sagrada urna. Las campanas defensoras tañen con fuerza desenvainando sus badajos y haciendo sonar sus sacrosantos bronces porque, ahora sí, amigos, los Defensores han ganado. No fue fácil la tarea, sólo seis efectivos pudieron ser desplazados hasta San Juan, una plaza en la que nunca los Defensores han mordido el polvo. Enfrente un equipo muy luchador que se defendió hasta el final tal y como reza el marcador final y al que hay que dar la enhorabuena.
Cinco Defensores comenzaron el partido desafiando cualquier rima fácil. Muy acertadamente, la Federación consideró oportuno dotar al partido de dos árbitros. Uno veterano y el otro un bisoño muchacho que comenzaba con el laudo de este partido su rito iniciático en las lides arbitrales. Los Defensores se convertían así en el West Point de la élite arbitral. Y no es para menos. Si hay un equipo ideal para que un árbitro pierda su virginidad, ese es el de los atentos y cariñosos Defensores, especialistas en principiantes. Además, sólo un equipo que desconoce cualquier regla sobre este deporte es capaz de plantear las situaciones más caóticas, absurdas y extravagantes con las que un colegiado puede topar en toda su carrera. Así pues, y con la responsabilidad de acabar con la doncellez del colegiado, los Defensores se entregaron a su tarea. El partido comenzó con más ganas que acierto por parte de ambos equipos. Rivalizando en incompetencia, el marcador final del primer cuarto lo dice todo: 3 a 8 a nuestro favor y para no variar nuestra línea, un cero de cinco en tiros libres. Durante los últimos cuatro minutos de ese periodo, ningún equipo consideró oportuno modificar el electrónico. A pesar de todo, los Defensores estaban jugando bien, hilvanando correctas jugadas a las que sólo faltaba la ginda de la canasta. Nuestros hombres ejecutaban fantasiosos movimientos, orquestando armoniosas combinaciones con el balón cual pasos de balet, evolucionando sobre el campo como una manada de gansos en formación. Desde el terreno de juego vimos a Álvaro aterrizar en nuestro banquillo, ya éramos seis. El segundo cuarto siguió la misma tónica con el marcador. Cualquier chavalín de primero de infantil podría seguir el encuentro pues las cifras que se manejaban invitaban a la suma fácil. Al descanso 10 a 14 (este no es el resultado del cuarto, es el del descanso ¿eh?). Pero en algo habíamos mejorado pues un increíble 3 de 4 en tiros libres nos convertía en unos hachas del lanzamiento. A la vuelta del descanso seguimos descansando y con diferencias de entre tres y seis puntos, siempre a nuestro favor, llegamos al minuto diez con un 16 a 19 en el marcador. En ese momento una falta sobre José Ignacio desató las iras de nuestros rivales que, encolerizados, pidieron explicaciones a los colegiados con demasiada vehemencia, tanta, que fueron sancionados con una técnica. En el momento de los tiros libres, el cónclave defensor se reunió eligiendo para su ejecución al capitán Pakhicius. Si los Defensores son ases en el arte del fallo libre, su capitán es maestro de ases. Sólo él fue capaz de ejecutar un complicado sistema de parábolas y ángulos, de inextricables funciones de trayectorias y líneas generatrices, de jugar con el ánimo de jugadores y público hasta última hora provocando un cóctel adrenalínico en las venas de los asistentes. En definitiva, que después de fallar sus dos tiros libres las cosas seguían igual. Pero cuando moría el cuarto dos tiros libres milagrosamente anotados por Peplowski nos daban un respiro, 16 a 21. En el último cuarto, un parcial de cinco a cero a nuestro favor dejaba un marcador que invitaba al optimismo, 16 a 26 en el minuto cuatro. Parecía que con marear el balón sería suficiente. 16 a 28 en el minuto siete. Sin embargo los tres últimos minutos fueron un festival cuxaril, ellos anotaban de tres en tres y nosotros de uno en uno, aún así la diferencia que manteníamos era excesiva y no pudo ser compensada por nuestros rivales. El marcador final, tan apretado como justo, repartía méritos entre ambos.
Defensores, con esta victoria nos vemos aupados al olimpo de los bajos fondos, a tan sólo once puestos del líder, una diferencia mínima dada nuestras potencialidades. De seguir así, nadie sabe de lo que seremos capaces. Pero nadie, nadie. Por ello, con la incógnita Defensora en el aire, sólo podemos poner sobre la mesa la certeza de un trabajo constante, aval imperecedero de una gloria que está por venir.
Gracias por vuestro esfuerzo muchachos.
¡Ravus et flava omnia vincit!

jueves, 11 de noviembre de 2010

Jornada IV

Sin todavía reponernos del esfuerzo del domingo anterior se nos reclama de nuevo para una nueva gesta. El sábado a las 19:00 en el pabellón de San Juan de Monzarrifar y contra A Kuxara. Entre las pocas reglas que me sé de este deporte está esa que dice que para poder jugar hacen falta cinco jugadores. Con las bajas seguras de Furillo, Miguel Angel, Ricardo, Camilo y Jorge, va a ser difícil reclutar a cinco valientes capaces de producir una ciclogénesis explosiva que acabe con nuestra racha de derrotas. Teniendo en cuenta que Álvarez manifestó sus dudas de asistencia, casi podríamos decir que seremos cinco los que asistamos al encuentro. Un número de peligrosa rima, Defensores. Con nuestro equipo sumido injustamente en la última posición de la tabla pero coronando la clasificación de elegancia y señorío, se demanda de ustedes un nuevo acto de entrega que nos devuelva al lugar que nos merecemos, sea éste cual sea.
¡DEFENSORES!

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Esfuerzo sin recompensa: Defensores 51 - Cañoneros 59

Partido muy trabajado el ofrecido por los Defensores en su feudo que sólo al final se decantó claramente por nuestros rivales. Más numerosos y más altos aunque no más guapos, los muchachos de Cañoneros tuvieron que sufrir para doblegar a los irreductibles Defensores que una vez más plantaron cara más allá del deber. A nuestro favor, una gran actitud de lucha y un colosal José Ignacio, en nuestra contra un deficitario 10 de 26 en tiros libres y algunas pérdidas de balón que dieron alas al contrario. Un equipo que se tuvo que emplear con fuerza y en el que destacó un jugador con seis triples que a la larga fue determinante. Enhorabuena para ellos.
El partido comenzó muy serio por nuestra parte. Su mayor altura parecía condenarnos al juego exterior pero buenas defensas y ataques peleados nos dieron la iniciativa. En el minuto nueve doblábamos a nuestros rivales 10 a 5. Luego, un minuto de desconcentración propició un parcial de seis a cero, incluyendo un triple en el último suspiro que les daba el cuarto por 10 a 11. En el segundo cuarto volvimos a la senda del trabajo y a los cuatro minutos ganábamos 16 a 13. A partir de ahí nuevas alternativas en el marcador que acabaron con un apretado 24 a 26 al intermedio del partido. La falta de Ricardo limitaba nuestro habilidoso manejo de los cambios en el puesto de base, la ausencia de Catapultae Dux mermaba nuestra capacidad ofensiva, la de Camilo negaba un respiro a esa élite de infantería que valemos para todo y lo mismo hacemos de base que de pívot, rayando en ambas posiciones al mismo nivel. Pero su falta, lejos de afectarnos, nos lanzaba con más vigor si cabe contra nuestros contrincantes. El tercer cuarto fue un nuevo intercambio de golpes en el que las máximas diferencias no pasaban de los tres puntos y por poco tiempo. Entrado ya el minuto nueve el marcador nos era favorable 36 a 35. Pero ese cuarto iba a acabar con una jugada desafortunada para nuestros intereses. Peplowski a dos segundos del final, saca desde la línea de fondo y lanza el balón para conseguir un triple sin mediación de ningún jugador, pero justo cuando el balón se acercaba a la canasta, no le faltarían más de veinte metros, impacta con la lona que un utillero del CAI había dejado olvidada a propósito en el techo (nótese la altura de miras de este equipo). La pelota acaba en poder de Cañoneros que lanzan un triple final y anotan. Si los Defensores tuvieran moral, ésta hubiera sufrido un serio revés al encajar por segunda vez un triple en la última jugada. El fin del tercer cuarto señalaba un 36 a 38. Comenzaba el desenlace definitivo del encuentro sin un favorito para llevárselo. Todo seguía igual en el minuto cinco del cuarto cuarto, cuando el marcador señalaba 42 a 43. Un triple de Cañoneros aumentaba su ventaja hasta los cuatro puntos, 42 a 46. Contestación Defensora con tres tiros libres anotados por una canasta de nuestros rivales reducía diferencias, ya entrado el minuto ocho 45 a 48, pero en ese momento, a dos minutos del final, el partido se rompe. Un parcial de cinco a cero pone las cosas difíciles para nuestros héroes, 45 a 53 indicaba el electrónico cuando empezaba el último minuto, la suerte nos enseñaba su feo trasero en el peor momento. Y cuando todo parecía perdido, los Defensores acudieron a la épica para lanzar un desesperado ataque que pillara por sorpresa a nuestros contrincantes. No les valía el empate, querían llevarse el partido y para ello se lanzaron a por sus sitiadores a bayoneta calada. El inicio de la deflagración comenzó en algún instante a lo largo de aquellos eternos sesenta segundos, cuando el capitán Pakhicius vio cómo el sudor de los Defensores había dibujado la imagen de Palafox, tal que una cara de Bélmez sobre la superficie del balón. Entendiendo el mensaje de nuestro prócer y arrojando la pelota como dios le dio a entender consigue un triple milagroso. Cañoneros anotaban, pero en la siguiente jugada el propio Peplowski vio, en un acceso de éxtasis místico, que el balón se convertía en una réplica exacta del seno izquierdo de Agustina de Aragón, oyendo una voz en su interior que le impelía a lanzar contra la canasta esa réplica de la "Ubre Magnificat" y consiguiendo un nuevo triple. Nuestros muchachos se acercaban a cuatro puntos con el partido lanzando sus últimos estertores. Lamentablemente, la presión posterior y las faltas cometidas rápidamente no salieron bien y tamaño esfuerzo no tuvo la recompensa adecuada. Los geniales Defensores veían cómo los Cañoneros conseguían canasta y dos tiros libres que cerrraban el encuentro en un 51 a 59 final.
Hay que felicitar a nuestros rivales pero también a nosotros mismos, porque los Defensores siguen abonando con sus sacrificios la estela de una fulgurante carrera. La historia, que es sabia, nos exige una nueva inmolación, pone a prueba nuestra capacidad, pero nosotros sabemos que esta nueva derrota nos hace más fuertes, superiores a los demás, virtualmente invencibles. Porque, decidme, Defensores, ¿alguien piensa que el Sitio de Zaragoza fue una derrota?, ¿hay quien crea que los Ultimos de Filipinas fueron unos vencidos?, ¿es Leónidas un perdedor?, ¿vio el Álamo un grupo de derrotados?, ¿es Numancia sinónimo de fracaso?
Sólo a los débiles la derrota les convierte en derrotados. No busquéis entre ellos a los Defensores.
¡GRIS Y AMARILLO!

viernes, 5 de noviembre de 2010

Jornada III

Defensores, una vez más el deber nos reclama. Poco importa que tras la retirada de la competición de los infames Craballers, hayamos dado con nuestros huesos en la última posición. Ya os dije que haciendo lo que sabíamos hacer llegaríamos donde nos merecemos. Y esto es sólo el principio de hasta dónde podemos caer. No os importe, a los objetivos se les alcanza desde abajo o se les atrapa cayendo sobre ellos. Arriba y abajo, delante y detrás, son conceptos que sólo importan en Barrio Sésamo y en las duchas y no afectan a un equipo que está por encima de clasificaciones. Muchachos, es el éxito el que está deseando alcanzarnos y no al revés.
El domingo se reeditará el duelo que tuvo lugar hace doscientos años en el mismo lugar. Las Tenerías serán testigo a las 11:15 de la mañana de cómo Los Cañoneros intentarán acabar con los Defensores. ¿Ganarán el duelo los Defensores aumentando su leyenda? ¿Perderán el encuentro consiguiendo así erigirse en vencedores morales por su galanura y donaire?
¡DEFENSORES!

miércoles, 27 de octubre de 2010

Odisea 2010: Villarroya 56 - Defensores 46

Primer partido de la temporada para los Galácticos Defensores que acusaron la novedad, la distancia, la falta de personal y un paupérrimo 6 de 22 en tiros libres (vamos, que lo acusaron todo), ante un equipo con mucha gente y ganas, en el que destacan dos claros líderes a los que acompañan más que dignamente un grupo de esforzados jugadores. Fantástica la ayuda que nos proporcionaron para llegar hasta allí y el recibimiento de unos chavales que le ponen ganas, con las únicas lagunas de la excesiva dependencia de algunos jugadores y la normal bisoñez de quien se inicia en estas lides.
Todo comenzó cuando recibimos un mensaje esperanzador desde los confines de la galaxia. Una vez desencriptado resultó ser la amable información que nos enviaba una nueva raza en la confederación social. En él se nos desvelaba con todo lujo de detalles el camino a seguir hasta su hogar, incluyendo desvíos, radares camuflados y todo tipo de información en la que sólo echamos en falta la situación de algún bar por si nuestros depósitos flaqueaban. La amabilidad de nuestros anfitriones sólo pudo ser compensada con la habitual entrega incondicional de los Defensores para los que lo intempestivo de la hora y la lejanía de nuestros nuevos amigos, no suponían sino un aliciente más en su sagrada misión de extender la Nueva Defensora por todo el cosmos. Para ello fueron seis los elegidos, a parte de por sus innegables capacidades, por la falta de otros Defensores que pudieran presentarse a tal misión. Recordamos el consejo del maestro Yoda: Tú ganar no puedes si gente poca a partido llevas. Aún así, seis mártires se aprestaron a la inmolación: José Ignacio, uno de los pocos seres humanos que en plena era atómica utiliza los pedales para desplazarse por el orbe Defensor. Miguel Ángel, atraído desde la capital del imperio a la periferia galáctica para vivir aventuras junto a sus congéneres Defensores. Álvaro, Defensor replicante con huesos de durilium del rasto de Saturno. Furillo, que como Chewbacca iba a conducir su particular Halcón Milenario sufeando en el espacio hasta nuestro objetivo. Jose, experto conocedor de lenguas galácticas y yo mismo, encargado de capitanear la flota Defensora en una nueva misión, como Kirk lo hizo con el Entreprise. Los seis nos preparamos para el largo viaje en la explanada de lanzamiento donde habíamos quedado. Poco antes del ocaso y después de salir de misa, nos repartimos en las dos naves que iban a transportarnos, sumidos en un plácido sueño inducido, hasta nuestro destino. Después de sortear las numerosas obras de la autovía interestelar, alcanzamos nuestro objetivo en lo que para el universo fue alrededor de una hora pero que para nosotros parecieron varios años de viaje. Salimos al nuevo mundo entumecidos y cansados. Miguel Ángel y Álvaro fueron los que mejor soportaron la criogénesis, el primero por la solución alcohólica que embebía su cuerpo y el segundo por carecer de terminaciones nerviosas agostadas por sus múltiples lesiones. Inquietos y decididos alcanzamos el lugar de encuentro, un hangar donde los villarroyácticos nos esperaban para darnos la bienvenida. Como constatamos, los villarroyácticos son seres amables, tan abundantes que casi parecen multiplicarse y por completo azules desde los pies a la cabeza pasando por sus bolsas de deporte.
En tal clima de unión de culturas comenzó el partido. Se notaba que ambos equipos necesitaban rodaje, ellos, como nos dijeron luego, no estaban acostumbrados a jugar, excepto un par de jugadores que llevaban el peso del equipo, y nosotros estando sólo seis, necesitábamos dosificar nuestro juego. El primer cuarto fue para el más experimentado, en este caso nosotros, que supimos manejar el tiempo del partido. No nos escondimos a la hora de defender y cometimos más faltas de las previstas, a pesar de que ya habíamos hablado sobre el peligro de cargarnos con ellas demasiado pronto. La voz de Yoda en nuestra cabeza nos hizo reflexionar: Cometer pocas faltas deberéis si el partido ganar queréis. El cuarto acabó 12 a 14 a nuestro favor. En el segundo la cosa cambió. Obligados a defender más cerrados, dejamos desprotegida la línea de triples desde la que nos metieron dos seguidos que rompieron la igualdad existente hasta entonces. Cinco puntos abajo en el electrónico a los cuatro minutos. Una nueva reacción Defensora lo apretó hasta el 22 a 20 pero un contraataque y otros dos nuevos triples lo alejaron hasta el 30 a 20 con el que llegaba el ansiado descanso. Varios detalles Defensores pudieron verse en el encuentro, el alien que Miguel Angel alberga en su estómago atrapar el balón antes que sus manos, alegres furilladas que desafiaban a la diferente gravedad, pero sobretodo una acción del androide Álvaro3PO en la que sufrió un golpe en esa parte de su cuerpo que imita una cadera humana. Enfervorecido por la épica Defensora se lanzó a capturar un balón dividido que estaba a punto de salir, logrando un salto que le hubiera dado la titularidad en cualquier equipo de fútbol, pero que resultó fatal para sus conexiones caderofemorales que saltaron hechas polvo. Un nuevo problema se sumaba a los demás, nuestro único recambio desaparecía. Así las cosas la reanudación supuso un incremento en el ritmo Defensor que encarando la última mitad del encuentro podía agotar sus reservas de fuerza sin tener que contenerse. Pero como es de todos conocido la fuerza hace tiempo que no nos acompaña. Los Defensores, heraldos de la confederación social, enseñaron a sus congéneres los grandes avances tecnológicos que traían, sobretodo el secreto de las pérdidas de balón, que hace que éste levite a voluntad del contrario y gracias a las cuales nuestros nuevos amigos pudieron irse otra vez en el marcador. Tres contaataques seguidos de su mejor hombre imponían la máxima diferencia 36 a 22 a los cuatro minutos del tercer cuarto. Todo parecía sentenciado, pero con todo en contra, en el peor momento, en terreno hostil, a miles de parsecs de su hogar, fue cuando los Defensores tiraron de casta. En seis minutos, consiguiendo un parcial de 2 a 10, estancando el marcador en un 38 a 32. Un lamentable 2 de 15 en tiros libres impidió la total remontada. Pero el esfuerzo iba a dejar a nuestros héroes sin reservas de defensorita y los motores fueron apagándose. El definitivo cuarto oscilaría con desventajas de entre cinco y nueve puntos pero acabaría con el 56 a 46 que refleja el acta, una diferencia de diez puntos que se fraguó en el segundo cuarto y que a la postre sería definitiva.
Los Defensores se despidieron cortésmente de los hombres azules antes de dirigirse a recibir un merecido baño con agua auténtica en las duchas aledañas al pabellón, donde pudiron conocer la costumbre local de ducharse de uno en uno en vestuarios poco presurizados. A la salida, nuevas despedidas y agasajos y la promesa de seguir compartiendo conocimientos a través de la inmensidad de las estrellas.
Un gran acierto de los compañeros villarroyácticos el de elegir a los Defensores para ser los primeros en aterrizar en su hogar para la ceremonia de la unión de su pueblo a la gran confederación social. Me quedo con las palabras que Álvaro2D2 pronunció con sus baterías agotadas: "Yo... he visto cosas que vosotros no creeríais... atacar a Defensores exhaustos más allá de Calatayud, he visto triples brillar en la oscuridad cerca de la puerta de Villarroya. Todos esos momentos se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia. Es hora de Defender." Y nuestro droide tiene razón, por muy lejano que se vea el destino, por muy imposible que parezca alcanzarlo, por mal que las cosas parezcan ir, siempre habrá alguien que dé ejemplo de abnegación y entrega, entre las nebulosas y los agujeros negros siempre se escuchará el eco de una estrella lejana repitiendo incansable a través de los eones: ¡Los Defensores no se rinden!

viernes, 22 de octubre de 2010

Jornada II

Nueva cita para los Defensores que a la postre va a ser la primera. Después de la espantada que sufrimos el domingo pasado, tenemos que reponernos para acudir a las lejanas tierras de Villarroya este domingo a las 18:00, reafirmando nuestro tronío en el mundo de la Social. Con las bajas confirmadas de Jorge, Camilo y Ricardo, y a la espera de la confirmación de Pepe, Alvaro y Óscar, de momento tan sólo cinco Defensores se aprestan a lograr una hazaña más para un equipo que si hace lo que sabe hacer logrará lo que está en su mano y que no es sino alcanzar aquello de lo que es capaz.
A sus puestos Defensores, ¡Ravus et Flava!
¡Omina BurgoRoyae genuflexum ante Defensorem sunt!

martes, 19 de octubre de 2010

Se lo hicieron encima: Defensores 2 - Craballers 0

Nueva victoria Defensora la que se pudo ver el domingo en Tenerías. Pero a pesar de la victoria nuestro Muro del Honor no se verá alterado por una nueva inscripción que en este caso no haría sino mancillarlo y empequeñecerlo. El domingo los Defensores no ganaron sobre el terreno de juego, sino en el campo más viril aún que es el de la educación. Por ello el resultado de 2 a 0 se queda corto para describir la distancia abismal que separa ambos equipos. Lo cierto es que los "Caganers" quedaron peor que Cagancho en Almagro porque por lo menos aquél fue. Muchas son las explicaciones que podría encontrar para dar respuesta al hecho de que ningún miembro de un equipo, por llamarlo de alguna manera, no aparezca a una cita. Sin duda la impresión de medirse a unas leyendas del baloncesto es la principal razón para que se hicieran caquita y se quedaran metidos en la cama arropados por mamá en lugar de vestirse por los pies y salir a dar la cara. Tal vez prefirieran ir a ver al Cai, archienemigo de los Defensores, o a lo peor hacía demasiado frío para ponerse en pantalones cortos y, temiendo atrofiar sus atenazados culitos se quedaron dentro de sus pijamas de princesas, no lo sabemos. El caso es que todos los equipos de esta liga han sufrido en sus carnes la falta de personal en momentos concretos, los Defensores no han sido una excepción, pero aún en los peores momentos y ante la ausencia de sus compañeros ha habido otros que han acudido a la cita para dar la cara y aguantar el tipo hasta la llegada de sus camaradas, misión para la cual siempre se ha contado con la comprensión del equipo rival, para retrasar la hora de comienzo o incluso postergar la cita. Por eso, el caso de los "Gabachers" es único en la historia de la Social, un equipo del que no sabíamos nada pero del que a partir del domingo lo conocemos todo al retratarse ellos mismos como unos impresentables, porque no se presentaron.
Recuerdo el memorable Sitio de Montcasa donde, hace ya bastantes años, el bueno de Álvarez acudió en auxilio de sus otros cuatro compañeros con un tobillo desguazado sólo para que el partido se pudiera jugar y poder así perder con honor. Es inútil hacer comprender a estos gabachos la importancia de las formas, el respeto al rival o la simple cortesía. Afortunadamente el ejemplo de estos cobardicas es un comportamiento aislado no sólo en el mundo de la Social sino en la ínclita prosapia de nuestra ciudad, que de haber contado entre sus ilustres ciudadanos con la presencia de individuos de este jaez, hubiera escrito su historia con las letras temblorosas del miedito más atroz. La Espantada de Zaragoza, Caquitaugusta, Angustiada de Aragón, Bajeza baturra... serían algunos de los nombres que se asociarían a nuestro solar patrio. Acertadamente si alguien piensa ahora en Zaragoza el nombre de sus Defensores aflora con orgullo y firmeza dejando las cosas en lugar que merecen.
Ignoro el castigo que esta acción puede depararles deportivamente hablando. Según el reglamento FIBA el partido debería constar como perdido por veinte a cero (a pesar de que en otros casos de incomparecencia, ni de lejos equiparables, el resultado fue de dos a cero como he puesto más arriba) y cero puntos en la clasificación. Extradeportivamente el estigma de arrastrase por las pistas de ahora en adelante con el baldón de la cobardía debería ser suficiente para que, en último acto de dignidad, decidieran retirarse de la competición.
La única nota positiva la puso de nuevo Casa Paricio, auténtico Defensor de los vermús y las mañanas de domingo, que tras el forzado partidillo se encargó de quitarnos de la boca ese sabor a canguelo con sus bolitas y salmueras. Defensores, hora es de pasar página y mirar al futuro dejando atrás este innoble episodio plagado de inmundicia, más propio de las cloacas gabachas que de las calles que pavimentan su suelo con la sangre generosamente derramada por nuestros próceres, verdaderos héroes incapaces de rehuir una cita así fuera ésta la de su propia inmolación. Así es la vida, para compensar la ignominia de unos, es nuestra obligación ofrecer el máximo sacrificio y expresión de nobleza consiguiendo así subir la media. El próximo fin de semana a buen seguro que tendremos ocasión de hacerlo, borrando con nuestra presencia y gallarda actuación la de aquellos otros que mal que nos pese reptan por nuestras calles, mancillan con sus temblorosas babas los botellines de Ambar y se acobardan tras los muros que otrora dieron ejemplo de arrojo y valentía.
¡RAVUS ET FLAVA!

viernes, 15 de octubre de 2010

Jornada I

Si quieres ver baloncesto
no te pases por favor,
que te piensas que sabemos
y te aburres un horror.
Y te aburres un horror
y te aburres un horror,
que lo de jugar no es lo nuestro
que lo nuestro es el humor.

Con estas joticas que se han oído hasta la saciedad durante las fiestas inauguramos la primera jornada de liga. Una liga que tal vez sea la de la consagración Defensora, el año en que los Defensores consiguieron por fin el éxito que tanto merecen. Nuestros jugadores siguen haciendo todo lo posible para que esto no ocurra remozándose en la vagancia que les caracteriza, holgándose en su molicie y rebozando su leyenda con las telarañas de la desidia. ¿Por qué confiar en esta panda de tunantes me preguntan muchas veces? La respuesta aparece en el lugar más insospechado. Y es que cuando uno ve al bueno de "Teen Wolf" Álvarez bajar de las montañas para venir a por su ficha al entenamiento dejando huérfana alguna cerveza en Interpeñas, cuando ha visto sus eurazos aportados con elegancia y desprendimiento en la cuenta defensora en primer lugar, uno piensa que todo es posible, que los Defensores son una calamitosa reunión de gandules con la extraña capacidad de ilusionar a todos sus seguidores y aún a ellos mismos por encima de sus capacidades, para hacerles creer que entre los detritus podremos encontrar diamantes, que se podrán cumplir las profecías que les auguran dormir un día, lejano o no, en el olimpo de los ganadores. Por todo ello Defensores os convoco a la primera batalla que libraremos este año en nuestro fortín de Tenerías el domingo a las 11:20 contra Craballers. Demostremos que los Defensores son los mejores ganen o no. Y recordad...
Si vienes a Tenerías
traete maño el jabón,
que si vienes con el gel
lo pasaremos mucho pior.
¡RAVUS ET FLAVA OMNIA VINCIT!

miércoles, 13 de octubre de 2010

¡Empecemos!

"Helos ahí refulgir entre las flores. Sus corazas albergan corazones y sus cabezas nobles pensamientos. Prestos con sus armas oxidadas acuden a un funeral que podría ser el suyo. No son los mejores pero son los únicos que tenemos. Ahora nuestro destino viaja con ellos."

Con esta cita del segundo acto de la ópera "Es gibt", y perdonad mi mala traducción del alemán, quiero comenzar la nueva temporada Defensora. Nuestra cuarta campaña, nuestro Tercer Año Triunfal. Pero como todo principio exige un final previo hagamos primero un resumen de lo que fue el final de la temporada pasada.
Los Defensores pusieron punto y final a la temporada con un retorno a los orígenes. Dos partidos perdidos ante La Roca y Lucres como en los viejos tiempos a una hora infame, en un campo infame, el de San Agustín en el que nadie estuvo agustín. El partido contra los rocosos no tuvo historia, dominaron de principio a fin con un jugador interior ante el que nada pudimos hacer y nos devolvieron la pelota de la primera vuelta en la que les ganamos en casa. El resultado final lo dice todo. Contra los muchachos de Lucres la cosa fue diferente, el hecho de que ellos acudieran sólo cinco equilibró la balanza a pesar de que nosotros arrastrábamos el cansancio de jugar el día anterior al que se añadía el de jugar el segundo fin de semana consecutivo dos partidos, si a eso sumamos que era el último partido de liga donde nadie se jugaba nada podemos encontrar explicación a un partido que más pareció una pachanga. Aún así, a pesar de jugar algo destensionados dejando la iniciativa a Lucres, supimos ponernos las pilas al final con un marcador muy ajustado al final, pero una serie de jugadas desafortunadas dieron al traste con nuestras esperanzas. Al final la mañana acabó de la mejor forma, con un triple de Catapultae en el campo y con unas cervezas en el bar.
El verano aportó nuevos trofeos a nuestras vitrinas con un subcampeonato en el tradicional torneo de Valdefierro que honra nuestras estanterías. Una vez más los amigos valdeferrensis se acordaron de nosotros y en una mañana de fiesta para el baloncesto todos disfrutamos de su organización y buen rollo tradicional. Enhorabuena. Fue nuestro último esfuerzo antes del tradicional parón estival.
Todas esas experiencias, un grano más en la playa defensora, nos han dejado en esta nueva temporada. Un año que nos trae muchas novedades pero sobretodo dos: la despedida del Chavi, un Defensor con serios problemas para controlar su innata tendencia a repartir tortas para el que sus dificultades con la autoridad nunca impidieron entregarse a la épica defensora como el primero. No deben preocuparse nuestros seguidores, su segunda despedida de la disciplina Defensora a buen seguro no es sino el preludio de una tercera o cuarta. ¡Hasta siempre camarada! En segundo lugar el cambio de terreno de juego aporta otro aliciente. Hartos hasta el aburrimiento de Santa Ana nos hemos decidido por Tenerías como fortín inexpugnable. La elección no es baladí, Tenerías, escenario como pocos de los combates contra el francés recoge en su historia la propia tradición Defensora. Ninguna cancha aúna como esta las cualidades de un terreno con las de un equipo.
Otra novedad que no nos afecta: He oído también que la federación ha creado nuevas reglas para este año. No paséis cuidado, si fuimos capaces de jugar sin conocer las anteriores no creo que debamos prestar demasiada atención a las nuevas.
Camaradas, contrincantes, afición, seguidores varios, los Defensores han vuelto por sus fueros. Nadie como ellos representa los valores de esta ciudad, a día de hoy sin presentar las fichas ni pasar los reconocimientos médicos pertinentes, acudiendo media docena a los entrenos en el mejor de los casos, sin aportar más dinero que el sobrante de la última juerga, sin dar señales de vida cuatro días antes de empezar. Ellos son igual que esta tierra, capaces de emocionarse con una jota sin saberse más que la del confite, de morir defendiendo la virgen del Pilar instantes después de maldecir a su hijo, de creerse que en los Monegros alguien vaya a construir un casino o de meterse quince en un seiscientos sólo porque alguien dijo que no podría hacerse.
Incongruentes, impredecibles, vagos, pero geniales, cachondos y adorables. Los Defensores han vuelto un año más para delicia de sus fans y padecimiento de los amantes del baloncesto. Ya estamos todos (bueno, por lo menos cuatro o cinco) así que ¡EMPECEMOS!

¡GRIS Y AMARILLO!

viernes, 24 de septiembre de 2010

Comunicado oficial

El departamento de comunicación y márketing de los Defensores se ve obligado ante los insistentes rumores de los que los medios de comunicación se han hecho eco, a ofrecer la siguiente nota de prensa:
Los Defensores no van a cambiar su nombre por el de Defensores de Labordeta.
En el caso de que la ciudad cambie de nombre por el de Labordegoza o Zaradeta los Defensores seguirán fieles a la antigua denominación.
De instaurar el consistorio la obligación de llamar José Antonio al primogénito de cada familia los futuros padres Defensores no se comprometen a acatar la orden.
Los Defensores se mantienen al margen de la posible iniciativa del ayuntamiento de hacer sonar el Canto a la Libertad antes de cada partido y el Arremójate la Tripa antes de la preceptiva ducha. De la misma forma se manifiestan acerca de la obligación del izado de mochila previo a los partidos.
No compartimos la nueva denominación del río Ebrodeta.
De sustituir el verbo pitufar por el de labordetear, los Defensores seguirán conjugando el primero.
Muchas gracias.
Departamento de Labordeteación y Joseantoning de los Labordetores de Zaradeta.

martes, 7 de septiembre de 2010

Amanece que no es poco

Con la música de Así habló Zaratustra escuchándose de fondo la nebulosa gris y amarilla hace la luz entre las tinieblas. Un punto de luz minúsculo que va engrandeciéndose hasta ocupar la totalidad del universo social alumbrando con su fulgor a cuantos son capaces de reconocer la excelencia allí donde se encuentra...

¡LOS DEFENSORES! el único equipo que no hace e.r.e.s. en su plantilla, la única asociación por cuyo rescate nadie pagaría un euro, un grupo que permanece ajeno a la crisis porque vive en ella, unos muchachos del pueblo que nunca se negarán a ir a Rodiezmo, los únicos que no eligen a su capitán en primarias, los que nunca anunciarán una tregua en sus acciones ofensivas y a los que jamás cesarán por conducir borrachos porque nadie en su sano juicio encomendaría cargo alguno. Ellos nunca devolverán los bienes porque no tienen ninguno.

¡LOS DEFENSORES! Se ríen del mundo porque antes el mundo se rió de ellos, portadores de la inextinguible llama que sus ancestros les transmitieron prenderán con ella el trasero de los que les preceden para ocupar su puesto. Rellenarán con su sagrada roña cuantas duchas se pongan en su camino dejando tras de sí un inconfundible aroma a colonia barata pero honrada.

¡LOS DEFENSORES! Su sóla mención hace temblar a sus adversarios en las oscuras y frías noches de Santa Ana y el hedor de sus ropajes paraliza a sus contrincantes a la par que embriaga a cuantas féminas les rodean con su inconfundible hedentina hormonada. Pelos en el desagüe, jabones huérfanos, alopecias acuciantes, virilidad a flor de piel.

¡LOS DEFENSORES! Unidad de destino en lo social, crisol de culturas, reserva moral de la Social Bronce, prietas las duchas, impasible la zona, inasequibles al aliento, superarán la pertinaz derrota y se agruparán un año más con sus troncos enhiestos en la lucha final que ha de llevarles a su destino por absurdo que éste sea dejándolo atado y bien atado.

¡LOS DEFENSORES! Juegan contra tí aunque a veces parezca que lo hacen a favor tuyo, defienden con delicadeza, anotan por error, botan cuando la pelota decide alcanzar su mano, conocen de oídas las reglas de este deporte y aún así les respetas sin explicarte el porqué. Hacen conmoverse tus más firmes convicciones cuando los ves aparecer en la cancha con sus uniformes grisygualdas haciendo que el tiempo pase más despacio mientras piensas: ¡dios, cómo les admiro!

Compañeros, queridos adversarios, seguidores varios, afición, un año más hace su aparición estelar el equipo más esperado del baloncesto maño. Con todos ustedeeeeees...
¡LOS GLORIOSOS DEFENSORES!

domingo, 23 de mayo de 2010

Fin de semana en el paraíso defensor

Defensores, lo ocurrido este fin de semana es algo al alcance de muy pocos. Hemos demostrado una vez más que la historia no es sino un libro en blanco en el que los intrépidos escriben con su sangre lo que otros no se atreven ni siquiera a imaginar. El destino siempre caprichoso elige a los que entintan con su esfuerzo esas páginas de gloria a menudo mediante el azar, pero la proverbial entrega de este grupo, siempre en primera linea, siempre en las barricadas de su propia odisea, hace que el azar tenga muy poco que ver a la hora de escoger en este caso a los bravos que escriben la épica de la Social.
Si los nombres de todos y cada uno de los Gloriosos Defensores refulgen con fuerza en el parnaso de los héroes, es justo reconocer que los ya conocidos como "Los siete del doblete" lo hagan con redoblada intensidad, con pristina pureza, como antes lo hicieron tantos otros antes que ellos. El azar ahora sí, en forma de lesiones y viajes les hizo portadores de una llama inextinguible, una llama alimentada por todos los compañeros que por una u otra razón no podían estar presentes y lejos de empobrecerse, de extinguirse, esa llama fue devuelta a la Casa Defensora más fuerte y vivificante que nunca. Nunca aquellos que delegaron en otros su propio honor pudieron estar más satisfechos de esa cesión. Nunca los réditos de un préstamo fueron tan pingües.
Una y mil veces me habéis demostrado de lo que sois capaces, una y mil veces se me ha puesto la piel de gallina al comprobar la generosa entrega de la que sois capaces. Yo, que creía haberlo visto todo en el mundo de la canasta, me froto los ojos al ver de lo que son capaces un puñado de locos por los que nadie daba un duro, y que con la única receta del esfuerzo y la fe asombran al mundo cada fin de semana o le hacen partirse de risa con la misma facilidad. Y después de cuatro décadas de experiencia paseando por las canchas, visitendo camisetas de todos los colores, me han temblado las rodillas bajo el peso de la enorme responsabilidad de estar a su altura, de ser el capitán de esta docena de locos cuyo único límite lo marca su propio deseo de hacer realidad lo que parece imposible. Estos dos días habéis demostrado que menos es más, que querer es poder, que los sueños pueden hacerse realidad con sólo tener fe. Gracias por vuestro esfuerzo, Defensores.
Los nombres de Pakhicius, Ricardo, Alvaro, Jorge, Jose, Furillo y Camilo estarán ya para siempre escritos con mayúsculas en ese epopéyico libro que recoge las gestas de los grandes Defensores. Un libro que empezó a escribirse hace mucho tiempo pero una de cuyas páginas más gloriosas comenzó a rubricarse el sábado día ventidós de mayo del año del Señor de dos mil y diez.

Acto Primero. Garras Defensoras: Independiente 46 - Defensores 50

Acudimos al pabellón de San Gregorio en cuadro, sólo siete y sin ningún pívot. Enfrente teníamos a los muchachos de Independiente en pleno uso de facultades, nos superaban en número, en peso y en altura, sólo el atractivo físico estaba de nuestro lado. Los Defensores una vez más estaban acorralados sin otra alternativa, al parecer, que ofrecer un bonito cadáver a los dioses de la Social, que caer con honor ante un rival en apariencia superior. El primer cuarto confirmó los peores designios, unos aros que repelían nuestras pelotas como si fuera el trasero de un compañero y un empanamiento consecuencia de ocupar puestos para los que no estamos acostumbrados nos dejaba con un 12 a 5 en contra. Pero tal vez por estar acorralados, por no tener nada que perder, nos revolvimos como gato panza arriba y una vez traído el partido a nuestro terreno, el de las panzas, fuimos capaces de darle la vuelta al encuentro consiguiendo al descanso un asombroso 15 a 23. El tercer cuarto fue un intercambio de golpes en el que los muchachos de Independiente consiguieron recortar en algo la ventaja concluyendo con un 24 a 30. Y en esas llegamos a la parte definitiva, esa en la que se iban a ventilar para bien o para mal nuestras opciones. Una canasta para cada equipo en el primer minuto nos acercaba al final manteniendo las diferencias. Dos tiros libres fallados por Independiente y dos canastas seguidas de Pakhicius ampliaban las diferencias hasta los diez puntos. Pero nuestro rival comenzó una defensa presionante a todo el campo que aunque no nos hizo perder balones sí que impidió mover cómodamente el balón provocando un atasco en ataque que aprovecharon para ir recortando poco a poco diferencias en el marcador. Un triple y una canasta les dejaba a cinco puntos, una canasta de Camilo nos alejaba a siete pero a partir de ahí empezaría un intercambio de tiros libres que sería fatal para nosotros. Fallamos cuatro, los mismos que acertaron ellos y que dejaban el marcador 36 a 38. A un minuto y medio para el final Independiente conseguía canasta y adicional que sin embargo no convertía. El empate ondeaba en el electrónico. En ese último minuto un nuevo intercambio de tiros libres de los que sólo anotamos uno 38 a 39. Independiente volvía a la linea de libres anotando uno de sus dos lanzamientos 39 a 39. La última jugada era nuestra, Jorge hizo lo que tenía que hacer, agotar el tiempo y lanzar a canasta para forzar la falta que sin embargo no se produjo. El partido acabó en una prórroga que de nuevo se nos presentaba en contra pues las faltas nos habían dejado ya sin recambios para los cinco que estaban en pista. Los primeros cuatro minutos y medio fueron más de lo mismo pero ahora los tiros libres sí que entraban lo que nos permitió aguantar el partido que a falta de minuto y medio estaba 41 a 43 para nosotros. En ese momento un triple de nuestros rivales les devolvía la iniciativa en el marcador que no habían tenido desde la mitad del segundo cuarto 44 a 43. Independiente se venía arriba y nos asestaba un golpe aparentemente mortal. Pero este equipo forjado en el fracaso, que tantas veces ha lidiado con la desesperación no conoce el miedo y hace tiempo que perdió la vergüenza. Sólo necesitábamos un acto de fe, una señal divina que nos lo recordase y cuando entregué el balón a nuestro insigne Catapultae vi en sus ojos el destello que anunciaba la certidumbre de que esa señal se iba a producir. Fue en ese instante en el que lanzando el balón desde donde cristo perdió el chaleco, consiguió el triple de la esperanza, el que hacía justicia e inclinaba la balanza de la victoria de nuestro lado 44 a 46. En un último minuto eterno dos tiros libres para cada equipo nos mantenía con dos puntos de ventaja. Aún dispondríamos de dos más que también fallaríamos y en la última jugada a dos segundos para el final una falta llevaba a Jose de nuevo a la fatídica linea. Falló los dos, pero el rebote luchado hasta el final por los Defensores fue capturado por el propio Jose que entrando hábilmente a canasta convirtió los puntos que certificaban la victoria poniendo el punto y final con el definitivo 46 a 50. Los nombres de estos héroes que consiguieron los puntos necesarios para traer una nueva victoria a nuestras vitrinas son pura anécdota, sólo la personificación de un esfuerzo colectivo hecho en nombre de un equipo cuyo nombre está por encima de todos aquellos que formamos parte de él. Los Defensores.

Acto Segundo. Fénix Defensor: Eurogrúas 40 - Defensores 50

No pintaban mejor las cosas el domingo. Los mismos siete capaces de la heroicidad del día anterior se prestaban sin complejos para repetir la historia. Más cansados pero con la misma ilusión de seguir dejando tras de sí no sólo una estela de hedor nauseabundo por sus camisetas todavía sudorosas sino también de una épica colosal. Las bajas que también asolaban a los compañeros de Eurogrúas nos daban algo de respiro pero sabíamos que no podíamos confiarnos pues ya fueron capaces de ganarnos en la ida en un partido también plagado de ausencias por ambos bandos. Salimos muy enchufados desde el principio, tanto que tomamos la delantera en el marcador desde el primer minuto y ya no volvimos a dejarla. 6 a 10 en el primer cuarto, 20 a 25 al descanso. Las distancias no eran significativas puesto que el nivel de ambos equipos era similar, los dos sabíamos que nos iba a costar doblegar al otro. El tercer cuarto supuso una ligera ventaja para nosotros por dos razones, la primera es que creo que fue entonces cuando un jugador de Eurogrúas tuvo un pinchazo en el gemelo que le obligó a retirarse y la segunda es que el marcaje al hombre que soportó Jorge hizo que otros compañeros tuvieran más opciones de tiro que fueron jugosamente aprovechadas. Al final del cuarto las diferencias se habían incrementado hasta los ocho puntos, 30 a 38. El cuarto definitivo mantuvo las diferencias hasta que en el minuto siete nuestros rivales nos endosaron un parcial de seis a cero que dejaba el electrónico en un apretado 40 a 45 a menos de dos minutos y con el balón en su poder. Fue entonces cuando en el tiempo muerto que pedimos nos confabulamos para no perder la tranquilidad, anímica y físicamente cansados podía ser el momento propicio para que los Defensores acusaran la fantástica presión que se cernía sobre ellos ante el reto que tenían delante. La jugada que iba a llevarse a cabo tras el tiempo muerto era clave. Si Eurogrúas acertaba a encestar se pondrían a tres puntos pero si éramos capaces de recuperar el balón el partido se pondría de cara. Nuestra defensa, impecable en los dos partidos resolvió el acertijo. Se pudo robar el balón lo que propició el contrataque y la canasta defensora 40 a 47 y quedaba un minuto. Nuestros rivales ya no volvieron a anotar. Una canasta de Furillo y un tiro libre de Jose nos daban el pasaporte a la gloria con el 40 a 50 final. Los Defensores lo habían conseguido.

Como siempre y más en esta ocasión es de ley felicitar a nuestros dos rivales, tanto Independiente como Eurogrúas realizaron un buen partido dando más mérito a nuestras victorias. Ninguna fue fácil, los dos vendieron cara su derrota. Los chicos de Independiente a pesar de no jugarse nada demostraron que en esta liga los objetivos de cada uno pasan por jugar cada partido como si fuera una final. Y los muchachos de Eurogrúas lastrados por las lesiones han demostrado con creces ser un equipo de casta que no da nada por perdido, esperemos que su jugador lesionado (uno más) se recupere rápidamente, quien sabe si en un futuro quizás no muy lejano ambos podamos medirnos con nuestras fuerzas intactas.
No diré nada más, los Defensores han hablado con creces con la fuerza de sus acciones. Disfrutad de un merecido descanso porque nuevos retos nos aguardan en el futuro. Sólo quiero felicitaros una vez más por vuestro compromiso y recordaros lo obvio, que somos los Gloriosos Defensores, el único equipo capaz de alcanzar lo inalcanzable, de coronarse o cagarla con la misma elegancia.
Por sus hechos los conoceréis.

¡GRIS Y AMARILLO!

viernes, 21 de mayo de 2010

Jornada Vigésimoquinta y pico

Defensores, un acúmulo de trabajo se cierne sobre nosotros. Inasequibles al desaliento y lejos de holgarnos en un final de liga laxo y pleno de molicie nos lanzamos con inusitada generosidad en busca de una empresa faraónica. Ganar dos partidos en mismo fin de semana. El primero el sábado contra Independiente en San Gregorio a las 18:30 y el segundo el domingo contra Eurogrúas en Santa Ana a las 12:30. Confirmadas las bajas de José Ignacio ya para el resto de temporada y de Miguel Angel, no nos queda sino encomendarnos al trabajo colectivo y a nuestra proverbial capacidad de sacrificio sobrehumano. Por si alguien necesitara un aliento extra os dejo aquí debajo la comunicación que hemos recibido de S.A.R. agradeciéndonos nuestros desvelos por su persona. Esto hará sin duda que los Defensores den otro impulso extra a un esfuerzo ya de por sí hercúleo.Gracias, S.A.R. ¡DEFENSORES!

miércoles, 19 de mayo de 2010

Victoria cómoda: Defensores 57 - José Nemry 25

El partido fue más cómodo de lo esperado, sobretodo teniendo en cuenta el partido de ida en el que las cosas no fueron tan fáciles. El primer tiempo a pesar de no saldarse con diferencias claras, 13 a 9 a nuestro favor ya dejaba claro que si seguíamos en nuestra linea la victoria nos sonreiría al final y es que los compañeros de José Nemry a pesar de ser voluntariosos y esforzados cuentan con un lastre demasiado pesado, la madurez hecha carne. Así nos dedicamos a forzar la máquina aumentando el ritmo de partido esperando un momento de ruptura que se produjo en el segundo cuarto con un concluyente 23 a 4 para nosotros que despejaba cualquier duda. Por si fuera poco el tercer cuarto también nos fue claramente favorable acabando en un parcial de 14 a 2 lo que dejaba las cosas claras aún a pesar del flojísimo cuarto final en el que jugando con poca tensión nuestros provectos rivales nos adelantaron en el marcador parcial 7 a 10. La clave del partido fue desde luego un ritmo alto de transiciones junto con una demoledora efectividad en la linea de triples (convertimos siete), apoyado con una brega incansable de nuestros dos únicos pívots. Precisamente ahí estuvo la nota negativa con la nueva lesión de José Ignacio de la que estamos a la espera de saber su alcance y que sumada a la lesión temporal de Miguel Angel y la crónica de el Chavi nos puede dejar huérfanos de gente alta en la endiablada recta final que afrontamos con cuatro partidos en dos semanas.
Ánimo Defensores, todavía tenemos opciones de clasificación, para ello bastaría ganar todos los partidos que nos quedan y que los equipos que nos superan los pierdan todos y además sean sancionados por la Federación por cualquier motivo. Luchemos por esa opción y si hemos de caer hagámoslo con el estrépito que merece el mejor equipo de la liga.
¡LOS DEFENSORES!

viernes, 14 de mayo de 2010

Jornada Vigésimocuarta y R.I.P. Antonio "Defensor" Ozores

Defensores, si el fin de semana pasado era S.A.R. el que nos daba un susto este fin de semana volveremos a salir afligidos al campo tras la triste noticia del fallecimiento de un gran personaje. Una persona que con sus escogurcios farciculaba en sus actuaciones las cachinarcias más reporperantes, alguien cuya fercinacia acopertía la miacercusa en una auténtica seripapia: Antonio Ozores. Películas como Tres suecas para tres Rodríguez, Los bingueros o El erótico enmascarado fueron auténticos hitos fílmicos en los que nuestro admirado actor formó parte. Recompongámonos y salgamos al campo a ofrecer a tan insigne personaje nuestra victoria. Será el domingo a las 11:00 en Santa Ana y frente a José Nemry.
¡DEFENSORES!

lunes, 10 de mayo de 2010

Luchando hasta el final: Paolos 48 - Defensores 38

Buen partido el que jugamos el sábado a pesar de la derrota, de nuevo acudimos siete a jugar pero con el problema añadido de que sólo contábamos con un pívot. Los Paolos aunque tampoco eran legión, creo que siete también, tenían un equipo más compensado lo que a la larga les daba ventaja. Los Defensores saltaron al campo más pendientes de las noticias que nos llegaban desde el Hospital Clinic de Barcelona donde había sido intervenido nuestro Monarca, a la sazón Capitan General de los Defensores, que del partido que nos ocupaba. Aún así, con la cabeza en otros asuntos, los Defensores salieron al campo con la intención de plantar cara al que hoy por hoy es el mejor equipo de la liga bronceada. Y así fue. El primer cuarto fue nuestro mejor cuarto, una defensa intensa y un gran acierto desde la linea de triples con dos de Pakhicius y un tres más uno de Jorge, nos permitió sentarnos en el banquillo con un 11 - 16 a nuestro favor. El segundo cuarto, sin embargo, nos fue bastante peor, al sentarse nuestro único pivot nos quedamos sin opciones en la zona lo que unido a un cambio de defensa de nuestros contrincantes propició un ligero empanamiento en ataque. Eso sumado a un nefasto cero de cuatro en tiros libres nos dejó con un 10 - 0 lo que sería determinante al final. Aún así, llegamos al descanso sólo cinco abajo, lo cual teniendo en cuenta que nos enfrentábamos a los primeros con un equipo de circunstancias no estaba nada mal. Las noticias que nos llegaban de Zarzuela también eran positivas, los doctores Molins y Barros nos tranquilizaron al respecto y eso hizo que nos centráramos más en el juego. La vuelta del descanso supuso una vuelta a la senda correcta, en el minuto cuatro del tercer cuarto las diferencias eran de cuatro puntos, de siete en el minuto ocho, acabando el cuarto con un 35 - 28 que mantenía las espadas en alto. Destacar de esta parte una acción, mencionada también en el blog de los Paolos y que desde luego es digna de reseña: nuestro gran Catapultae Dux, al enterarse por las señas que le hacíamos desde el banquillo que la salud de S.A.R. no corría peligro se atrevió a ejecutar en su honor una de sus acrobacias con el balón, una pirueta conocida como "Triple en penetración leve con virginidad sostenida" que hizo las delicias del público pero que suscitó una polémica sin fundamento en las filas Paolistas. Puesto el asunto en manos de nuestro departamento jurídico, éste nos remite la siguiente nota que hago pública:
"Los servicios jurídicos del C.B. Defensores de Zaragoza quieren hacer la siguiente precisión respecto a la polémica generada por la validez o no de la canasta conseguida por su jugador número ocho Excmo. Sr. D. Jorge Catapultae Dux. Citando textualmente el reglamento Oficial de la FIBA en su edición 2008 vemos en su artículo 16, apartado 1 punto 1 que "Se convierte una canasta cuando un balón vivo entra en el cesto por arriba y permanece en él o lo atraviesa". Según este apartado podemos dar la canasta por convertida puesto que el balón vivo (de hecho no paró de moverse durante todo el partido) entró en el cesto por arriba (los Defensores siempre lo introducen todo por el sitio correcto, aquí no hay discusión posible) y si bien no lo atravesó debido a la composición fimótica de la red sí permaneció en él el tiempo justo para hacernos hablar a todos. Asímismo en el apartado 1 punto 2 puede leerse: "Se considera que el balón está dentro del cesto cuando la parte más insignificante del mismo está dentro de él y por debajo del nivel del aro". En este sentido desde los servicios jurídicos del Club manifestamos que la penetración no fue cosa de la puntita nada más sino que el balón hoyó con su esfericidad toda lo que viene siendo la canasta rival. Nos apoyamos para ello en que el balón fue explusado por efecto del estrechamiento anormal (como todo en ese campo) de la red que, por virtud y efecto del constreñimiento propio de su ser lo que sumado a una elevada velocidad del objeto esférico alcanzada como consecuencia de la parábola descrita en su lanzamiento, produjo un colapso en la trayectoria del balón, frenándolo y ejerciendo una fuerza igual pero de sentido contrario, que propulsó el ente pelotil fuera del seno reticular. Todo este proceso hubiera sido imposible de no alcanzar el balón dicho estrechamiento lo que, de facto, lo sitúa dentro de la canasta y por ello por debajo del nivel del aro, haciendo válida la canasta. Con todo ello debemos desestimar la petición del equipo de Los Paolos de dar, según su apreciación, una canasta por válida cuando el balón hubiere traspasado completamente la red, como así se hace constar en su blog. Dicha consideración del traspasamiento como condición necesaria de la penetración nos llevaría por otro lado a la disculpa de actuaciones de otra índole que por su nefanda actitud quedan fuera de lo es el ámbito de este blog."
El último cuarto (después de este paréntesis) supuso el despegue definitivo de nuestros contrincantes, con una serie de canastas paolistas unidas a una sequía Defensora lograron ponerse catorce arriba en el minuto seis lo que a la postre sería una diferencia insalvable para nosotros que a pesar de reducirse no pudo ser remontada concluyendo con el definitivo 48 - 38.
Felicitemos a nuestros rivales por una victoria que no les hicimos fácil pero que supieron conseguir gracias a un buen y compensado equipo que con toda seguridad y mérito les va a llevar a los play offs.
Felicidades para nosotros también, queridos Defensores porque una vez más nos batimos con energía y dejamos claro que las derrotas Defensoras no son gratis. Por último tranquilizaos por el estado de salud del Monarca que según las notas que me han hecho llegar, se recupera satisfactoriamente.
Ravus et Flava

lunes, 3 de mayo de 2010

Espíritu defensor: Defensores 48 - Mediana 42

"Dadme un ejército de soldados y os ofreceré una buena batalla, conseguidme un puñado de valientes y pondré a vuestros pies un país, reunid una docena de cobardes que tengan fe en un objetivo y os traeré el mundo" (Generalion. Alcibíades de Calcis 801 a.C. - ?)

Por fin la copa se llena de hidromiel y no de la leche agriada de la derrota. Por fin la sangre que empapa la tierra no es la nuestra. Por fin los Defensores vuelven a reunirse por encima de los contubernios que intentan hacerles zozobrar en la venerable misión para la que están predestinados. Después de largos meses de ausencia el espíritu Defensor planea de nuevo en la sagrada fecha del dos de mayo.
Por primera vez después de mucho tiempo los Defensores acudían a un partido con más efectivos que su rival, éramos diez Defensores contra cinco medianos. Confabulados para sacar rentabilidad de esa superioridad decidimos empezar el partido con una intensidad elevada de juego que nos diera el mando del partido. No obstante nuestro objetivo no iba a ser fácil, por un lado hacía tanto tiempo que no jugábamos con tantos jugadores que la falta de costumbre nos jugó una mala pasada, por otro lado los tres triples que nos endosaron nuestros rivales del domingo hizo que el primer cuarto acabase con un 11 a 13 en contra. Aún así, convencidos de que estábamos en el camino correcto seguimos con nuestra filosofía. Los triples de Catapultae Dux no entraban, algunas jugadas no se resolvían como esperábamos pero todos estábamos convencidos de la victoria porque la suma de nuestras conciencias Defensoras había vuelto a crear ese ente que nos sobrepasa y juega como un arma secreta siempre a nuestro favor: el espíritu Defensor. Al comienzo del segundo cuarto las cosas empezaron a carburar y tras un dos más uno de Jose el electrónico señalaba un 16 a 13 en el minuto tres, los Defensores ya nunca volvieron a ir por detrás. Eso no significa que el camino fuera fácil, dos nuevas incorporaciones de nuestros rivales, una de ellas su hombre más alto, equilibraba las fuerzas haciendo que nuestro ataque se ralentizara al mejorar la defensa mediana. Tras empatar en el minuto seis llegamos al descanso con cuatro puntos de ventaja 25 a 21. Hasta la mitad del tercer cuarto las cosas estuvieron igualadas 27 a 25 pero llegado ese punto un golpe de mano Defensor liderado por tres triples de nuestro artillero anuló la resistencia mediana a pesar de que también en su haber se contabilizaban dos triples, 42 a 33 al final del tercer cuarto, la ligera presión que ejercimos a la salida del balón junto con una elevación de la velocidad de juego iba inclinando la balanza de nuestro lado. El definitivo cuarto se movió en diferencias que oscilaban entre los diez y los ocho puntos, puesto que a pesar de que los muchachos de Mediana nunca bajaron los brazos el espíritu Defensor de nuevo pesaba más que los dioses de los lares medianos. Al final una absurda y totalmente inmerecida técnica a Jorge en el último minuto del partido maquilló el resultado dejándolo en el definitivo 48 a 42.
Felicitemos a nuestros rivales por su lucha a lo largo de todo el partido, su pericia y buen juego da más valor a nuestra victoria que deja los enfrentamientos ligeros entre nosotros en dos victorias para cada equipo.
Enhorabuena Defensores, el domingo demostramos que si permanecemos juntos, si acudimos a la llamada como un solo hombre, la victoria caerá irremediablemente de nuestro lado. Poco importa que no conozcamos ni la mitad de las reglas de este deporte, que seamos incapaces de conseguir cuatro botes decorosos o que acabar dos contraataques seguidos nos provoquen agujetas crónicas.
Cuando estamos juntos somos... ¡los Gloriosos Defensores!
RAVUS ET FLAVA

jueves, 29 de abril de 2010

Jornada Vigésimosegunda

Nueva cita defensora el domingo a las 11:00 en Santa Ana contra Mediana. Qué os iba a decir... que no hace falta que nadie confirme si va a venir o va a dejar de venir, que cada uno vaya yendo y luego ya, si eso, jugamos. Que estamos, pues entramos a lo que es el juego, que no completamos, pues vemos lo que va siendo la solución. Que no sea esto una cosa de comerse la cabeza y para aquí y para allá que si ahora tengo que jugar que si ahora me ausento de la presencia. Ya os digo, que ser, somos, pero no es cuestión de ser, ser, que nosotros somos más de llegar a ser y viendo que se puede pues tirar para adelante.
¡Defensa et Patientia!

miércoles, 21 de abril de 2010

La Gloria Defensora

Quiero aprovechar este fin de semana de nuevo parón liguero aunque lleno de actos institucionales para nuestro equipo, santo y seña de esta ciudad, para pronunciar la que seguramente será la última arenga defensora de la temporada. En un momento en el que las ausencias, las bajas, las lesiones y la pertinaz derrota se ha cebado en nosotros parece que todo esté perdido, que todo por lo que en un tiempo luchamos sea algo olvidado, que adormecidos en el burdel de la indiferencia los Defensores se hayan convertido en un equipo más y los gélidos vientos de la derrota amenazen con extinguir la llama Defensora. Pero es ésta una llama que se ha alimentado siempre de los sacrificios de un grupo humano conjurado para llegar allí donde nunca nadie ha llegado, para conseguir aquello que nadie osó nunca pretender. En este enfangado contexto todos esperan que bajemos los brazos e hinquemos las rodillas, pero los Defensores sólo nos hemos arrodillado para recoger a nuestros camaradas caídos y seguir adelante o para buscar alguna pieza de jabón en la ducha.
Yo les digo a todos esos vendepatrias que es tarde para cambiar, es tarde para hacer de nosotros una rama seca llevada sin rumbo por el viento, tarde para convertirnos en peleles sin alma. Defensores, recojamos nuestras armas y volvamos a la batalla. Sé que muchos de vosotros anheláis regresar a vuestras casas después de una larga temporada de sufrientos, pero nuestras familias que nos esperan ansiosas no quieren vernos llegar a cualquier precio, pues saben que sin honor no hay vida, preferirán mil veces vernos llegar envueltos en el sudario gris y amarillo si ese es el precio que hemos de pagar por defender los valores que nosotros mismos forjamos a fuego, por dignificar nuestra épica prosapia.
Estamos atravesando un páramo, es cierto, pero esta travesía por el desierto nos llevará un día a la tierra prometida si tenemos fe en ello, si somos capaces de no escuchar los cantos de sirena que nos invitan a abandonar, a dejarnos ir, a no luchar. A nuestro lado tendremos el aliento a todos aquellos que vistieron estos colores y de todos aquellos que los vestirán algún día. Por todos ellos, pero también por nosotros no podemos abandonar ahora. Será entonces, cuando hayamos llegado a esa tierra de promisión cuando podremos holgarnos en el relato de nuestra historia en torno a una jarra de vino. Cuando otros hayan recogido el testigo será posible el descanso de los viejos guerreros que mostrarán con sus hechos la senda a los Nuevos Defensores.
Este final de liga va a suponer un esfuerzo extra. El reciente ascenso a la ACB de nuestro archirival el CAI supondrá a buen seguro que muchos de nuestros jugadores van a ser tanteados para cambiar de equipo, pero esta situación que podría desestabilizar el vestuario de cualquiera debe servir en nuestro caso para unirnos todavía más en la causa común Defensora. Para renovar los votos que un día ya lejano en el tiempo pero no en el sentimiento gritamos al viento en presencia de la grisygualda y que aún tañen fuerte en nuestros corazones.
Sólo quedan cinco jornadas, cinco finales para sacudirnos la caraja, reagruparnos y volver a la senda Defensora. Una senda en la que nos acompañan como dos meretrices la Victoria y la Derrota, ambas caras de una misma moneda y por las que nunca nos hemos preocupado porque nuestra cita final no es con ellas.
Es con la Gloria.

lunes, 19 de abril de 2010

Más dura será la caída: Triple X 50 - Defensores 44

Todo empezaba mal en el pabellón Río Ebro, a cinco minutos para el inicio del partido sólo cuatro efectivos plantaban cara al destino. Gracias al árbitro y al equipo rival conseguimos un aplazamiento que nos permitiera ir a buscar al único defensor localizado a esas alturas del sábado. Por fin, veinte minutos más tarde daba comienzo el partido. Poco se puede decir de la situación que atraviesan los gloriosos Defensores, el llegar casi a no poder jugar un partido a pesar de contar con doce fichas es una situación que habla por sí sola, aún así, de nuevo, nadie podrá decir que este equipo ha dejado de acudir a un duelo. El encuentro empezó con un Triple X muy enchufado que acertaba todos sus tiros mientras que nosotros fallábamos algunos muy claros lo que no hacia sino empeorar la situación, 6 a 0 en el minuto tres, 10 a 3 en el minuto cinco, 14 a 6 en el ocho. Al final del cuarto 19 a 9. Una diferencia que nos lastraría todo el partido. Como en todos los últimos encuentros en los que nuestro juego interior está desaparecido dependíamos de que nos entraran los tiros lejanos, cosa que iba a suceder en el segundo cuarto. Una gran reacción en los primeros seis minutos incluidos un triple de Pakhicius y otro de Jose nos ponían con una desventaja mínima de 19 a 18 tras un parcial de nueve a cero. Pero el mayor poderío en el juego interior de nuestros rivales arrimaba de nuevo el ascua a su sardina y hacia inútil nuestra reacción. La diferencia sería de cinco puntos al descanso con un 31 a 26. El tercer cuarto volvió a ser Triplista, nuestra inferioridad interior hacía que tuviéramos que recurrir a las faltas para frenar a los rivales que se ponían en el minuto diez con una ventaja de siete puntos tras anotar siete de los diez tiros libres de los que dispusieron. Un 40 - 35 mantenía la diferencia que ya consiguieran en el primer cuarto. En el último, un arranque de casta avalado por una nueva racha de triples (uno de Jose y otro de Catapultae) igualaba el encuentro a 44 cuando restaban escasos tres minutos para el final, pero la respuesta de nuestros contrincantes con tres canastas interiores dejaba el electrónico con el 50 a 44 final.
El guión del partido fue siempre el mismo, Triple X se dedicaba al juego interior y nosotros al exterior, un triple suyo frente a siete nuestros (casi la mitad de nuestra anotación) lo refleja claramente. Pero es que nada más podíamos poner en juego puesto que sólo contábamos dentro de la pintura con la presencia de Peplowski, que afortunadamente volvió a los terrenos de juego después de una ausencia de dos meses, con la lógica falta de forma a pesar de batirse como un jabato como es habitual en él. No obstante su mayor acierto en el primer cuarto que les proporcionó una jugosa renta sería definitivo a la postre y haría infructuosa nuestra reacción.
Hay que volver a agradecer a Triple X y al árbitro su paciencia por esperar a que reuniéramos a cinco personas (al final acabamos siendo siete, Furillo y Jose con evidente riesgo de regurgitar la reciente comida) lo que nos permitió tener la oportunidad de jugar. Reconozcamos a los primeros una fulgurante transformación después de que el año pasado se llevasen el galardón a Gabacho del Año mientras que hay que decir del árbitro que es un personaje cabal, por un lado no lo hace mal, pero es que además es un tipo humilde que antepone los intereses del juego por encima de los suyos. Gracias y enhorabuena a todos.
Los Defensores, por si alguien no lo había notado están atravesando un bache, de hecho están en caída libre, pero incluso en estos momentos de vacilación nos quedan los arrestos necesarios para plantar cara a la adversidad y decir aquello de que entre los muertos siempre habrá una voz que diga que los Defensores no se rinden.
¡Que no nos rendimos, coño!