martes, 9 de octubre de 2012

Primer asalto: Defensores 48 - Bajo Gállego 51

El primer partido de los Defensores se saldó con una inmerecida derrota en el asfixiante Alberto Maestro. Sólo siete Defensores, de los cuales dos nunca habían prestado servicios en la primera línea, se enfrentaron a un conjuntado equipo que el año pasado había militado en plata. Los oscuros intereses del contubernio federativo nos enviaron a un árbitro desafecto a los intereses Defensores que nos pitó hasta cuatro técnicas  ninguna de ellas merecida. La primera, al banquillo por protestar virilmente una más que dudosa falta, la segunda a Óscar por reclamar la posesión de su brazo en una peleada lucha con un rival, la tercera a Arturo por recriminar justamente una fea actitud de un contrario que, una vez en el suelo, intentó gabachamente derribar a nuestro pívot con una patada y la cuarta a Jose por intercambiar unas palabras con un contrario. Si a esto sumamos un porcentaje de tiros libres que nos llevó a anotar siete de veintiséis, la dificultad para ganar el partido se elevaba hasta límites insospechados. Aún así, y a pesar de ir hasta ocho puntos abajo en la parte final del segundo cuarto o perder de nueve en el último minuto del tercero, los Defensores supieron sacar la casta que les caracteriza para llegar a estar dos puntos por debajo en el último minuto de partido. En ese momento incluso pudimos ponernos por encima al disponer de dos tiros libres de los cuales sólo anotamos uno pero la suerte no nos favoreció esta vez. Tampoco en el último tiro, un lanzamiento lejano de Óscar que a punto estuvo de entrar y que hubiera significado el empate y a buen seguro la victoria posterior. En cualquier caso, quedémonos con una nueva demostración de pundonor defensor que nos va a llevar, estoy seguro, a las más altas cotas de la clasificación liguera.
No obstante, el encuentro pasó a un segundo término cuando, una vez acabado el ritual de la ducha por los caballeros Defensores, abandonó las sagradas instalaciones un joven ante la atónita mirada de cuantos estábamos allí. La presencia del muchacho, cubierto con una capucha, cabizbajo y con una sospechosa mochila, marcó un expediente X pues nadie lo vio entrar. ¿Cómo logró entrar sin ser visto? ¿Qué bizarras prácticas desplegó durante su estancia? ¿Piensa repetir su experiencia? y lo que es más importante ¿qué Defensor le gusta más?
Defensores, los únicos ciudadanos a los que no se puede modular su derecho a la victoria, seres superiores a los que no les importan los recortes porque tienen mucho más de lo que parece, personajes que se duchan por encima de sus posibilidades y a los que nunca les falta el crédito.
¡DEFENSORES!

3 comentarios:

defensor13 dijo...

Extraordinaria y acertada crónica de lo que ocurrió en la cancha. Una nueva derrota que glosar nuestra abultada lista de fracasos que no pueden pese a todo restar un ápice del brillo solar que desplegan nuestras victorias, que no pueden apagar siquiera un gramo del destello de nuestra pulida faz.
Hubo alguna fea acción del rival, sí, pero, ¿qué no acaba resultando feo cuando lo comparas con el donaire defensor?, las más exquisitas prácticas son zafias al lado de nuestra grácil disposición.Pero para mí como muy bien apunta nuestro capitán, el clímax de la primera jornada se produjo con la aparición estelar de ese "pajero fantasma", de ese misterioso mirón que surgió de la nada, para nuestra sorpresa, después de haber dejado lleno de charquitos blancos algún oscuro rincón del vestuario. No me extrañaría que algún video protagonizado por nuestras pichas esté ahora colgado en alguna bizarra página web. O quizá algún ojeador del CAI que había venido a robarnos ideas defensivas, a calcar alguna extraordinaria jugada de nuestra producción, decidió colarse en nuestro vestuario para desvelar nuestro "auténtico secreto"
RAVVS ET FLAVA

Prince Of The Rodeo dijo...

Hola Defensores!
El pasado domingo comenzó una nueva temporada en la cual poder demostrar todo el tronío y elegancia que destila este gran equipo.
Solamente recordaros que hay mucho "afrancesado" por ahí suelto, sobre todo en el estamento arbitral.O como bien diría Paco Martínez Soria, "los del pitico". Dicho esto propongo la creación de un nuevo premio a otorgar a final de temporada para recordar la "faena" más destacada del año a cargo de un trencilla, compañero de sudores y madrugones. El premio bien podría denominarse:"Heredero De Fernando VII". Lo dejo en el aire.
Ánimo muchachos, queda mucha temporada!!!
RAVVS ET FLAVA
P.D: El jovenzano de la gorra no iría a "limpiar" las pertenencias defensoras que estaban depositadas en el vestuario.O como bien se apunta en el comentario de Furi, no se recrearía en las apolíneas figuras defensoras para limpiar su sable...CUIDADO CON LOS TRAVESTÍS QUE SON MUY RENCOROSOS!!!

jugon81 dijo...

que ganas de jugar que tengo jaajajaa tengo mono y este domingo a las 12,30 nos enfrentamos a los primeros queridismos capullos jajajaa el gordo les va a dar pal pelo jajajaa