lunes, 15 de febrero de 2010

Un San Valentín de muerte: Defensores 34 - Grupo Uno 37

Amarga derrota la sufrida en domingo frente a Grupo Uno. Un partido que dominamos durante treinta y cuatro minutos y lo perdimos en seis.
Acudimos seis a jugar esa gélida mañana de San Valentín y luego se nos unió Alvaro, enfrente un rival más nutrido hacía presagiar una mañana de sufrimiento. Efectivamente sufrimos pero nuestro esfuerzo iba a tener recompensa al principio, jugando bien a pesar de nuestra falta de efectivos en la zona y con el apoyo del recuperado Furillo que se bregó bien sobretodo en los rebotes defensivos nos fuimos al descanso con un contundente 12 a 4 en el marcador. A la vuelta Grupo Uno reaccionó bien y nosotros entramos en un pequeño bache, en parte por dar descanso a nuestros escasos hombres altos, lo que nos hizo terminar la primera mitad con un más apretado 19 a 16. En la reanudación volvimos más enchufados y también algo más frescos, conseguimos un parcial de 13 a 5 que ponía un muy favorable 32 a 21 en el electrónico a falta de minuto y medio. Lamentablemente otra reacción visitante maquillaba el resultado hasta un 32 a 27 al final de ese tercer cuarto. La parte final del partido sería nefasta, tras un intercambio de canastas los rivales se ponían por delante en el minuto cuatro 36 a 37, a partir de ahí se nos acabó el amor, una combinación de falta de ideas, precipitación, cansancio y fallos en los tiros libres dio al traste con nuestra relación haciendo que la Victoria nos diera calabazas, ya que a pesar de recuperar la iniciativa en el marcador en el minuto nueve 43 a 42, el partido se nos escurrió entre las manos al final, 44 a 47.
Una lástima ya digo haber perdido un partido que teníamos controlado, como decía antes por un lado el cansancio de tener que jugar con menos recambios, a pesar de que no fue un partido muy físico, por otro la falta de hombres altos, sobretodo además porque ellos tienen uno que lo es mucho, también la fatal precipitación con la que jugamos el minuto final y sobretodo un horrendo porcentaje de tiros libres. Pasamos de tener un 75% (9 de 12) de acierto durante todo el partido a un paupérrimo 10% (1 de 10) en los cinco últimos minutos, de haber seguido con el porcentaje que llevábamos o incluso con uno más normal del 50% hubiésemos ganado.
Felicitaciones a los chicos de Grupo Uno que a pesar de ver en ocasiones cómo nos alejábamos en el marcador supieron seguir trabajando, y también darles (y darnos) la enhorabuena porque a pesar de llegar con tensión y ajustados en el marcador a los minutos finales y de sufrir un arbitraje un poco malo para las dos partes que podía haber desquiciado a cualquiera con menos temple, supimos quitarle tensión al ambiente entre las dos partes. En estos días de villarato cruel es el último recurso que nos queda a todos los jugadores socialistas.
Ahora a pensar en el próximo partido a ver si nos quitamos la caraja que llevamos encima, conseguimos ganar de una vez y salir de esta racha.
¡Arriba Defensores!

1 comentario:

defensor13 dijo...

excelente resumen del partido. Sí, hermanos, se nos escapó la victoria com una trucha entre las zarpas de un oso excesivamente obeso. Fuimos mejores durante todo el partido para acabar siendo peores al final. Yo lo achaco sobre todo al cansancio físico. Y al acierto rival, claro. Al final nos ganaron qué joder...
A ver si espabilamos porque esa buena imagen que habíamos construído a base de victorias de raza se está diluyendo como un azucarillo en un baso de aguardiente. Como decía ese gran pensador, es el "Sabio de Hortaleza" solo hay que pensar en GANAR Y GANAR Y GANAR, GANAR, GANAR Y GANAR Y GANAR Y GANAR, GANAR, GANAR Y GANAR...
RAVVS ET FLAVA