Hoy el análisis es sencillo, todo el que se acercó al gélido pabellón de Santa Ana tuvo ocasión de presenciar el peor partido de la historia de los Defensores. Nunca tuvimos opciones de ganarlo porque nunca estuvimos en el partido, acudimos desganados y desmotivados y eso hizo que no entrase nada y que Maccabi nos ganara con dos jugadores. No creo que tengamos que perder más tiempo en este partido, tan sólo la actuación de Furillo queda como mención positiva de nuestra nefasta actuación que también contagió a nuestra tradicionalmente activa afición. Lo dicho, pasemos página, contábamos con que habría partidos malos y asumamos que este ha sido uno.
Defensores, lo bueno de tocar fondo, de hacerlo rematadamente mal y navegar por la cara B del basket es que lo único que podemos hacer es mejorar, nada puede salir peor, confiad en mí si os digo que a partir de ahora todo cambiará, la noche sólo alumbra un día, el invierno sólo trae la primavera, el desastre sólo anuncia la reconstrucción. Defensores, recoged vuestras maltrechas pertenencias y preparaos para una travesía en el desierto que no hará sino llevarnos a la tierra prometida.
En mis múltiples cavilaciones nocturnas fruto de mis vigilias paternas he estudiado detenidamente nuestro caso y he desarrollado una estrategia cuyo nombre en clave es O.B.A.M.A. (Organización Básica Antes (que) Muerte (por) Anarquía). Me parece que nuestro mayor problema somos nosotros mismos, nuestra nefasta política de cambios, no existe otra explicación para que unos jugadores de nuestra talla no encuentren en el campo los resultados adecuados a su valía. En el fondo estamos muriendo de éxito, no os parezca raro, la explicación es terriblemente lógica ¿cómo puede ser que un equipo alcance sus mayores glorias deportivas jugando con siete o incluso menos jugadores y caiga a lo más bajo al estar diez? Porque somos Defensores. ¿Por qué ganó nuestro insigne Palafox? Porque estaba en inferioridad. ¿Por qué los ejércitos de Napoleón fueron derrotados? Porque eran más y mejores. Efectivamente defensores, murieron de éxito. Así pues me gustaría poner en práctica una política de cambios insertada en esta estrategia denominada D.E.F.E.N.S.A. (Dotación En Fases Empírica Nominativa y Separadamente Autónomas). Dicho movimiento maestro se traduce en formar dos grupos equilibrados de hombres que jugarán el primer y tercer cuarto y otro el segundo y cuarto cuarto respectivamente. Soy consciente de que este movimiento atenta contra cualquier esquema racional de este deporte y dinamita cualquier sentimiento racional del basket pero creo sinceramente que encaja como un guante en nuestra filosofía de vida y lucha. Se trata en suma de crear dos grupos de jugadores que lucharán en inferioridad de condiciones contra el rival y que serán sustituidos por otro grupo que de la misma forma será inferior pero cuya acción combinada acabará por doblegar la resistencia rival. Defensores: seamos débiles para fortalecernos, dividámonos para estar unidos, empeoremos para mejorar. Os planteo mis dos equipos que he llamado J.O.D.I.E.N.D.A.S. (Junta Organizada Defensora Integrada En Núcleos Defensores Autónomos Salvadores): Jorge, Furillo, Álvaro, Oskarevic y José Ignacio. Por otro lado: Jose, Ricardo, Camilo, Pakhicius y Peplowski. Creo que les podemos sacar partido a esta estrategia, no nos afectarán los cambios de ritmo al entrar a jugar y parar y volver a entrar, sabemos perfectamente quién está jugando de qué (no como ahora que no sabemos si ha salido uno u otro) y por otro lado nos permite descansar un rato. Muchachos, todas estas cogitaciones nocturnas no pueden ser sino una genialidad o una estupidez mayúscula, opinad. También los que estáis al otro lado de la pantalla tenéis algo que decir si así os parece, casi cuatrocientas visitas en diez días hablan de una intrincada red de seguidores anónimos a los que por otro lado no podemos defraudar. No lo haremos señores, asentémonos bien en el fondo para tomar un mayor impulso que nos encubre o más bien nos lleve allí donde siempre deberíamos haber estado. Pónganse en pie y griten conmigo: Yes, we can!
¡DEFENSORES!
Defensores, lo bueno de tocar fondo, de hacerlo rematadamente mal y navegar por la cara B del basket es que lo único que podemos hacer es mejorar, nada puede salir peor, confiad en mí si os digo que a partir de ahora todo cambiará, la noche sólo alumbra un día, el invierno sólo trae la primavera, el desastre sólo anuncia la reconstrucción. Defensores, recoged vuestras maltrechas pertenencias y preparaos para una travesía en el desierto que no hará sino llevarnos a la tierra prometida.
En mis múltiples cavilaciones nocturnas fruto de mis vigilias paternas he estudiado detenidamente nuestro caso y he desarrollado una estrategia cuyo nombre en clave es O.B.A.M.A. (Organización Básica Antes (que) Muerte (por) Anarquía). Me parece que nuestro mayor problema somos nosotros mismos, nuestra nefasta política de cambios, no existe otra explicación para que unos jugadores de nuestra talla no encuentren en el campo los resultados adecuados a su valía. En el fondo estamos muriendo de éxito, no os parezca raro, la explicación es terriblemente lógica ¿cómo puede ser que un equipo alcance sus mayores glorias deportivas jugando con siete o incluso menos jugadores y caiga a lo más bajo al estar diez? Porque somos Defensores. ¿Por qué ganó nuestro insigne Palafox? Porque estaba en inferioridad. ¿Por qué los ejércitos de Napoleón fueron derrotados? Porque eran más y mejores. Efectivamente defensores, murieron de éxito. Así pues me gustaría poner en práctica una política de cambios insertada en esta estrategia denominada D.E.F.E.N.S.A. (Dotación En Fases Empírica Nominativa y Separadamente Autónomas). Dicho movimiento maestro se traduce en formar dos grupos equilibrados de hombres que jugarán el primer y tercer cuarto y otro el segundo y cuarto cuarto respectivamente. Soy consciente de que este movimiento atenta contra cualquier esquema racional de este deporte y dinamita cualquier sentimiento racional del basket pero creo sinceramente que encaja como un guante en nuestra filosofía de vida y lucha. Se trata en suma de crear dos grupos de jugadores que lucharán en inferioridad de condiciones contra el rival y que serán sustituidos por otro grupo que de la misma forma será inferior pero cuya acción combinada acabará por doblegar la resistencia rival. Defensores: seamos débiles para fortalecernos, dividámonos para estar unidos, empeoremos para mejorar. Os planteo mis dos equipos que he llamado J.O.D.I.E.N.D.A.S. (Junta Organizada Defensora Integrada En Núcleos Defensores Autónomos Salvadores): Jorge, Furillo, Álvaro, Oskarevic y José Ignacio. Por otro lado: Jose, Ricardo, Camilo, Pakhicius y Peplowski. Creo que les podemos sacar partido a esta estrategia, no nos afectarán los cambios de ritmo al entrar a jugar y parar y volver a entrar, sabemos perfectamente quién está jugando de qué (no como ahora que no sabemos si ha salido uno u otro) y por otro lado nos permite descansar un rato. Muchachos, todas estas cogitaciones nocturnas no pueden ser sino una genialidad o una estupidez mayúscula, opinad. También los que estáis al otro lado de la pantalla tenéis algo que decir si así os parece, casi cuatrocientas visitas en diez días hablan de una intrincada red de seguidores anónimos a los que por otro lado no podemos defraudar. No lo haremos señores, asentémonos bien en el fondo para tomar un mayor impulso que nos encubre o más bien nos lleve allí donde siempre deberíamos haber estado. Pónganse en pie y griten conmigo: Yes, we can!
¡DEFENSORES!
6 comentarios:
Querido hermano y capitán:
Me sumo a tus cavilaciones nocturnas con las que estoy deacuerdo al 90%. En cuanto a que fui el único cuya actuación pudiera subrayarse sólo puedo interpretarlo desde el punto de vista de que, al ser un mediocre entre mis camaradas, cualquier destello de acierto, carambola o furillada hace parecer que he hecho un buen papel, en el fondo, solo la mala puntería del resto hizo que mi actuación fuera "más brillante", si bien es cierto que estoy orgulloso de esa jugada de 3 puntos, entrada con canasta más tiro libre anotado, que me hizo entrar en el parnaso del basket y que me dio esperanzas de que quizá en un futuro pueda ser un jugador "simplemente malo". Pero es el hecho de engrosar las filas de los DEFENSORES lo que me da auténtico valor como jugador. Mis conclusiones son que estuvimos nulo s de puntería y fuimos excesivamente blandos en la defensa. Nuestros oponentes no eran precisamente tipos aguerridos, pero supieron llevarnos a su terreno de algodones para que, entre caricias y arrumacos, guiños y zalamerías, todos nos hicieramos la picha un lío. Si alguna vez fuimos "Bambis" quizá fuera este domingo... no puedo acabar un partido sólo con dos faltas... Mi conclusión:
"Igual de peligroso es el rudo marinero que el efebo lastimero, pues por el culo te han de dar,
lo mismo el segundo que el primero"
APLAUSOS A LA HINCHADA DEFENSORA
DEFENSOREEEEEES
Pero camaradas, ¿qué ocurrió este domingo? He de admitir que me ha sorprendido el marcador del partido, sinceramente estaba convencido de que podíamos ganar este encuentro; sin duda volver a perder de una manera tan abultada es una nueva decepción. Aún así, vaya mi admiración hacia todos los que estuvistéis allí.
Pienso que, como dice el capitán, somos nuestros peores enemigos, y desde luego no tiene ningún sentido que siendo 10 estemos haciendo peores partidos que cuando éramos 5 ó 6. El hecho de ser más hace que nuestro ego se vea más afectado con estas nuevas derrotas, ya que antes nos sobraban las excusas: "Es que sólo éramos cinco, y así...", "Es que eran más jóvenes", "Es que nos falta altura", "Es que no tenemos un base que sepa subir la bola"... Ahora que todas esas frasecillas que repetíamos como un mantra ya no tienen valor las derrotas escuecen mucho más. Ahora somos un equipo competente, somos 10, más o menos como cualquier rival, tenemos tres hombres que, sin ser excesivamente altos, nos aportan centímetros que no teníamos en la Copa Primavera (con la única excepción de Peplowski), tenemos dos bases que saben subir la bola perfectamente (Jose y Jorge Z.); en cuanto a la edad, ahí si que no hemos mejorado mucho, pero siempre nos quedará Alvarito que nació más tarde que Naranjito. Lo tenemos todo hermanos defensores, sólo nos falta saber usarlo.
Como señala nuestro insigne capitán Pakhicius, hay que organizar el asunto de los cambios, personalmente soy partidario de hacer dos equipos, y me parecen perfectos los que señala el capitán. Eso sí, no estoy de acuerdo con jugar dos cuartos enteros con cada quinteto, simplemente me parece que hay que establecer recambios naturales, así nadie se perderá al saltar a la cancha y sabrá qué posición le corresponde. Tengamos en cuenta además que esos quintetos estarán incompletos en más de una ocasión, bien sea por motivos laborales, personales, familiares, etc., lo cual hace inviable el reparto equitativo de minutos. También opino que no hay que ser más papista que el Papa, evidentemente todos tenemos que jugar, pero si alguien está enrachado no lo vamos a quitar, ¿no? Si yo me tengo que sacrificar porque (es un ejemplo) Furillo está teniendo 5 minutos estelares, me sacrificaré y aguantaré en el banquillo a que llegue mi turno; quiero jugar, pero también me gusta ganar, y si gana el equipo yo gano. De todas formas creo que hay que hablar largo y tendido acerca del asunto de los cambios. El resto de problemas creo que tienen una solución bastante obvia; sé que siempre digo lo mismo, por e-mail, en los posts, en los comentarios del blog, pero es que sigo pensando que el secreto reside en el ENTRENAMIENTO. Hasta que no nos pongamos las pilas nuestros partidos serán todos un calco: aquellos equipos que sean un poquito superiores a nosotros nos arrollarán, y sólo nos quedará intentar ganar a los que estén a nuestra altura o sean un poquito inferiores, y seguramente esto ocurrirá con el mismo sufrimiento con el que ganamos a A Kuxara.
Eso es lo que creo que nos espera, pero lo que verdaderamente me da miedo es que la gente vaya perdiendo fuelle y ganas, me asusta como empieza este post, cito textualmente: "...nunca estuvimos en el partido, acudimos desganados y desmotivados". Esto es lo que va a ocurrir si no levantamos el vuelo, la gente empezará a dejar de venir a los partidos (total, para perder de 20...), nuestra afición perderá la fe en nosotros y el espíritu defensor se verá herido de muerte. Estoy seguro de que no queréis que eso ocurra, así que pongámonos a trabajar todos para enderezar el rumbo de esta nave antes de que sea tarde. La primera prueba de fuego será este fin de semana ante el C.B. Mediana de Aragón. Yo soy un Defensor y estaré allí, yo creo en este equipo, ¿y tú?
¡¡¡DEFENSOREEEEEEEEEEEEEEEES!!!
Yo he de decir que no me faltó motivación, ni creo que a ninguno de nosotros le faltara... ese el el 10% en el que no estoy deacuerdo con el capitano, no creo que estuvieramos desganados ni desmotivados al menos hablo por mí, porque de ser así directamente no se va al partido... los que fuimos fuimos a jugar y simplemente tuvimos un mal día... yo he de apuntar que me ví un poco peor de fondo físico que la última vez...
Lo siento muchachos, en nuestro particular mundo de prosa grácil y adjetivación superlativa no he sido capaz de dar con unos epítetos que definieran con exactitud nuestra posición en el partido. En ningún momento quise decir que la gente acudiera desganada ni desmotivada, sé que no es así. Tal vez debería haber dicho descentrada, distraída o adormilada y el primero que me pongo en la lista soy yo. Sé que no estaba desmotivado ni desganado pero no me encontré bien en ningún momento, no hice ninguna personal que es lo que creo que da una idea de la implicación del jugador en el partido (contra A Kuxara me echaron por cinco), perdí balones, en suma estaba perdido y desubicado. Sé que nadie en este equipo acude a los partidos desganado ni desmotivado así que perdón por usar unos adjetivos que ningún grisamarillento se merece.
Dicho lo cual sí que me sumo a la idea de que entrenar es la mejor solución a pesar de que yo no pueda ir entre semana a ningún entreno (tal vez algún sábado y con alfileres). Tampoco estaría de más que estuviéramos un rato antes en el lugar de los hechos para ir hablando de quién sale, de qué vamos a hacer, etc., que no sea llegar y engranar porque eso también me impide concentrarme en el partido. Creo que es muy importante salir motivados desde el primer minuto y las conversaciones antes de empezar pienso que favorecerían ese hecho.
Defensores, aceptemos el próximo reto del destino este sábado y salgamos al campo a rompernos las pelotas por la causa ravusflaviana.
¡Arriba la defensa, abajo la adjetivación torticera!
Me acaba de llegar un mensaje de parte de Pelowski que dice así: "Tenemos pista reservada mañana de 20:00 a 21:00 en la Jota, en las piscinas". Se está gestando el primer entrenamiento defensor serio de la temporada, si puedes venir no dudes en hacerlo, entrenar es la única receta para corregir nuestros errores y alcanzar la gloria deportiva. Yo estaré allí, eso sí, agradecería que alguien proporcionase un poco de información sobre cómo llegar a las citadas piscinas, imagino que el bus será el 32, espero vuestra colaboración.
Si alguno de vosotros, a pesar de no formar parte del equipo, quiere venir al entrenamiento, puede hacerlo perfectamente, vuestra colaboración es importante. En cuanto a la rectificación del capitán, tomo nota de sus sabias palabras; sinceramente, me extrañaba mucho que alguno de vosotros, Defensores, no estuviese motivado en un partido. Aún así, sigo pensando que si no corregimos mínimamente nuestro rumbo, tanta derrota sí que puede desembocar en desánimo y falta de compromiso, espero equivocarme, y sobre todo espero festejar cuanto antes la segunda victoria defensora.
GRIS Y AMARILLO... ¡¡¡COMO MI CALZONCILLO!!!
RON JEREMY:
Queridos defensores solo deciros una cosa... Yes you can!
Come on boys, let´s kicking asses!
Fuck off boys, see you leater fellas!
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