lunes, 23 de febrero de 2009

Cuidado con los Defensores: Defensores 51 - Mediana 57

Muchachos, no cabe duda de que en este equipo se ha obrado un cambio sustancial, tanto de mentalidad como de juego que nos está acercando inexorablemente a la victoria. Ante Mediana, un equipo actualmente cuarto y en puestos de play off que nos endosó diecisite pepinos en la ida los Defensores hicieron un papelón y perdieron de seis tras forzar la prórroga de un partido que pudieron ganar.
El partido comenzó con un primer cuarto de ensueño en el que defendimos bien, movimos bien el balón y estuvimos afortunados de cara al aro, en total un parcial de 18 a 11 a nuestro favor. En la reanudación nuestros contrincantes cambiaron su defensa asfixiando nuestro juego exterior y propiciando un atasco en ataque que nos dejó 4 a 17 en ese cuarto. Resumiendo llegamos al descanso 22 a 28, seis abajo y con la incertidumbre de si continuaría la empanada. Pero como ya he dicho en otras ocasiones este equipo se ha lavado la cara, se ha quitado las legañas y ya no da nada por perdido, se lucha con uñas y dientes en todas las posiciones pero es que además hemos descubierto nuevas facetas que nos hacen más versátiles, en definitiva, nos adaptamos a los cambios. En la reanudación su adelanto de filas lo corregimos jugando más tras su primera línea, sobretodo en el poste alto donde se habían quedado más espacios desprotegidos consiguiendo así canastas cerca del aro o personales que nos hicieron acabar el cuarto con un 10 a 9 a favor. Habíamos recortado un punto, la diferencia era sólo de cinco pero nos habíamos acercado aún más durante el desarrollo del cuarto. Estábamos enchufados al partido. Por fin se inició el último cuarto en el que ofrecimos más de lo mismo, agresividad y buena defensa que propició robos de balón y contraataques que nos ponían tres puntos arriba a los cuatro minutos. El toma y daca terminó con un punto abajo cuando quedaba medio minuto y Oscarevich en la línea de tiros libres, teníamos la oportunidad de ponernos por delante. Tiempo muerto en el que hablamos de nuestra estrategia: sin faltas si conseguíamos anotar uno o dos tiros y falta rápida si fallábamos. Oscarevich lanza el primero y ¡anota!, lanza el segundo y ¡falla! el rebote acaba en la torre rival, voy a presionarle para evitar que saque fácil el balón y en ese momento me paso por el forro toda la estrategia, en un exceso de celo cometo falta y hay que ir a los tiros libres. Cuando vi a su pívot preparse para tirar el balón comprendí porqué, aún sin ser yo consciente, había transgredido nuestro protocolo de actuación acordado en el tiempo muerto, tal vez la mano del mismísimo Tío Jorge había empujado la mía para cometer esa falta. Ese muchacho iba a fallar sus dos tiros y el balón acabaría en nuestro poder para jugarnos nuestro destino en un último tiro. Mis convicciones resultaron ser ciertas, falló sus dos tiros y el balón acabó en nuestro poder. Lamentablemente en el ataque Jorge no oyó las indicaciones que le avisaban de que quedaban apenas diez segundos y no pudo armar bien el tiro, un tiro que de todas formas salió de su muñeca condecorada y llegó a alcanzar el aro rival pero sin fortuna. El partido había acabado con un empate técnico, habría prórroga. Una prórroga que tuvimos que jugarla sin Pepe que cometió su quinta falta privándonos así del que fue sin duda el mejor jugador del partido, anotando dieciséis puntos, triple incluido, forzando innumerables faltas y reboteando como un titán. Así las cosas poco más que pundonor podíamos ofrecer ante un equipo mucho más alto que se limitó a forzar el juego interior consiguiendo un parcial de 4 a 10 en esa prórroga y ganando al final de seis.
Poco más que añadir salvo las felicitaciones un equipo, el de Mediana que a pesar de ser un poco gruñones en ocasiones son buena gente y saben explotar sus armas. Por lo que a nosotros respecta, ya digo, un cambio de actitud que nos hace pelear hasta el fin, mejora importante de algunos jugadores clave como Peplowski y Oscarevich que parecen haber conectado en muchas jugadas de ataque, buenas reacciones ante cambios defensivos del rival, anulación de rivales (su cinco nos metió cinco triples en la ida, en el partido de ayer metió dos, nos pusimos las pilas y se acabó su carrera), robos de balones, contraataques, y lucha sin cuartel que parecen ser nuestras señas de identidad en esta segunda vuelta. Y sobretodo, y por encima de todo, una aficción que crea escuela en esta liga, que nos mantiene en tensión los cuarenta (y cinco) minutos del partido y a la que porfin estamos dando buenos momentos de baloncesto. Ningún equipo es capaz de movilizar tanta gente en sus gradas y eso se nota en los momentos duros del partido. Gracias.
Si me permitís una opinión personal teniendo en cuenta nuestros ajustados resultados en la segunda vuelta, que muchos de esos partidos los hemos jugado con bastante falta de personal, entre ellos la de nuestro pívot de referencia y nuestra actitud rayana en lo heroico, nuestra apabullante estética, nuestra inteligencia y sobretodo nuestra afición superlativa, me permito afirmar sin ningún género de dudas que somos hoy por hoy, el mejor equipo del campeonato (algo que no por sabido hay que dejar de constatar).
Ahora a esperar el siguiente.
¡RAVUS ET FLAVA, camaradas!

2 comentarios:

binguero dijo...

Trepidante reseña del encuentro, capitán. Textos como éste hacen que a uno se le erice el vello y se le haga un nudo en el estómago ante la gloria que acompaña a este equipo sin par, por otra parte no puedo sino sentir envidia de mis camaradas, que han sido ungidos con el signo de la heroicidad, que han sido elegidos por designio divino para disputar este emocionante e histórico encuentro. Coincido plenamente con el análisis de nuestro capitán, quien asevera que se ha producido una sustancial mejora en el juego de los Defensores, no hay más que echa un vistazo a los marcadores más recientes para comprobarlo. Cuidado, porque ya no somos un equipo blando, ya no somos aquellos "Bambis" que empezaron la liga hace cuatro meses, ya no nos dejamos llevar en los finales por nuestros males endémicos, un vicio éste que nos llevaba a terminar con abultados marcadores en contra, no, nada de eso, ahora resurgimos como el Ave Fenix, no perdemos el tiempo en lamernos las heridas y nos ponemos el traje de faena con el único objetivo de meter más canastas que nuestro adversario; así es como se gana un partido.

No cabe duda de que estamos por el buen camino, y que nuestro rendimiento en los últimos encuentros, teniendo en cuenta sobre todo la dimensión de nuestros rivales (tres de los cuatro primeros clasificados), nos hace presagiar días de gloria, jornadas victoriosas teñidas de los colores defensores. No obstante, hay que seguir trabajando y no dejarse llevar por los oropeles de esa victoria que se antoja próxima, de modo que sigamos como hasta ahora, manteniendo nuestra fe y dándolo todo en la cancha, no podemos relajarnos ni un solo segundo; nuestro objetivo sigue siendo no quedar los últimos, y éso, capitán, camaradas, fidelísima afición, aún es posible. Por cierto, ya que sale a colación nuestra hinchada, quiero agradecer y reconocer, una vez más, públicamente su valor y el papel fundamental que desempeñan en nuestros encuentros; ellos y ellas (sobre todo ellas) son el sustento moral de este equipo, GRACIAS afición.

Y para terminar, siguiendo con el tono optmista y positivo de esta entrada, me gustaría daros una buena noticia, y es que el galeno me ha dado el visto bueno y ¡¡¡ya puedo regresar a la disciplina defensora!!! Ayer mismo, el traumatólogo me confirmó que me había roto el dedo, nada de luxación, lo que sufrí fue una fractura. Él mismo se sorprendió ante la rapidez de mi recuperación, el muy ignorante no sabe que los defensores estamos hechos de otra pasta y que nuestra testiculina es capaz de regenerar cualquier tejido oseo por dañado que esté. De este modo, tras un mes de baja, estoy listo para enfundarme la elástica defensora cuando sea menester, este viernes, el sábado, el domingo, o todos los días de la semana, estoy dispuesto a dormir con el uniforme si hace falta, a cambiarme en una cabina telefónica cual hombre de acero, lo que sea, pero quiero jugar ya, quiero estar al lado de mis camaradas, aquellos a los que nunca debí abandonar. Capitán, estoy a tu disposición y a la de los colores defensores, permitidme que con lágrimas en los ojos grite una vez más...

¡¡¡DEFENSOREEEEEEEEEEEEEEES!!!

defensor13 dijo...

No cabe duda, camarada Palosevich, de que eres un bravo!, ¡vengaremos tu hueso roto con cien victorias!, parece que el próximo choque se barrunta para este viernes a las 21 horas. Así que vete preparando.
Por otro lado extraordinario análisis de nuestro Capitano. Con su fino bisturí analítico ha sabido eviscerar el encuentro, sajar nuestros errores, sanear nuestros aciertos y preparar al enfermo para una recuperación acelerada de cara a nuestro próximo encuentro.
Teniendo en cuenta nuestras múltiples bajas, y que incluso alguno de los allí presentes no se encontraba en su mejor momento físico (el camarada Guerreróvich, se iba por las trancas, pero supo retener todo aquel caudal fecal para, transformado en pundonor y gallardía, enfocarlo en la dirección precisa) me pareció un encuentro inmejorable de los Defensores, que no considero precisamente una derrota, sino más bien un empate. Gloria pues a los Defensores una vez más.
RAVVS ET FLAVA